Con lo que alcanzaron a juntar de ropa y objetos personales, 23 de los 31 miembros de la familia Reyes Salazar salieron la madrugada de este sábado de esta ciudad, ante las amenazas de muerte registradas contra otro de sus parientes.
Autoridades realizaron un sigiloso operativo especial para trasladarlos a la ciudad de México, donde decidirán en qué país se van a asilar.
Olga Lidia Reyes, integrante de la familia, confirmó lo anterior y añadió que la partida se dio tras una recomendación que les hiciera la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Ella abandonará el estado este domingo.
Por “cuestiones de seguridad”, tanto los Reyes como las autoridades omitieron dar detalles de cómo se dio la salida. Jorge González, fiscal de la zona norte, sólo informó a la agencia AFP que se trasladaron vía aérea.
El viernes, Marisela Reyes Salazar informó que Estados Unidos era la opción más viable para refugiarse —incluso ya tramitaban la solicitud de asilo a ese país— aunque también tenían otras alternativas como España y Francia.
Por la noche de ese día, los familiares que estaban en un plantón frente a la Fiscalía dejaron el lugar y fueron resguardados en un hotel de la ciudad, vigilado por elementos policiacos.
Desde 2008 la desgracia sigue a la familia Reyes Salazar en el Valle de Juárez. Seis de sus miembros, cuatro de ellos hermanos, un nieto y una nuera, han sido ejecutados.
La embajada de Estados Unidos en México confirmó que personal diplomático de esa delegación se reunió con miembros de la familia Reyes.
Les dijo que las sedes diplomáticas no son el lugar donde se reciben solicitudes de asilo, sino que esa categoría se puede obtener realizando el trámite en la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados o acudiendo a un punto fronterizo de ingreso a territorio estadounidense.