El Vaticano acogió este sábado el Concierto con los Pobres, un evento anual impulsado por el Papa Francisco que contó con la participación estelar del cantante Michael Bublé y la presencia del Papa León XIV, quien al finalizar destacó que "la música no es un lujo para unos pocos, sino un don divino accesible a todos, ricos y pobres".
El artista canadiense interpretó un repertorio preparado especialmente para la ocasión y en cuya selección intervino el propio León XIV, quien entregó a Bublé una lista de peticiones para la presentación del 6 de diciembre, incluyendo piezas como "Ave Maria" y "Feeling Good".
En el concierto también intervinieron el Coro de la Diócesis de Roma y la Nova Opera Orchestra, que recibieron al Pontífice con la interpretación de "Tú Eres Pedro".
Más tarde, Marco Frisina dirigió una serie de piezas navideñas como "Puer natus est nobis" y continuó con "Joy to the World".
"La música es como un puente que lleva a Dios"Al concluir el evento, el Papa se dirigió a los asistentes y afirmó que "la música es como un puente que lleva a Dios".
"La música puede elevar nuestra alma, no porque nos distraiga de nuestras miserias o nos haga olvidar los problemas y situaciones difíciles de la vida, sino porque nos recuerda que no somos solo eso; somos mucho más que nuestras desgracias, somos hijos amados por Dios", subrayó.
El Pontífice destacó que la música "es capaz de transmitir sentimientos, emociones, incluso los movimientos más profundos del alma, elevándolos y transformándolos en una escalera ideal que conecta la tierra y el cielo".
Recordó además que el Concierto con los Pobres es un evento anual "nacido del corazón del Papa Francisco", con el propósito de unir música, fraternidad y solidaridad.
De los 8 mil asistentes, 3 mil eran personas en situación vulnerable que fueron invitadas al evento y a quienes se ofreció una cena al concluir la ceremonia.
