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SLP dejó de ser una entidad joven

San Luis no tiene infraestructura ni preparación para atender a adultos mayores y la realidad médica es alarmante

San Luis Potosí está viviendo una transformación silenciosa pero profunda, la pirámide poblacional está cambiando de forma acelerada y, en apenas una década, el estado dejará atrás su bono demográfico para entrar de lleno a una etapa dominada por adultos mayores. La tendencia ya es visible y sus efectos se sienten en escuelas, hospitales y políticas públicas que no estaban preparadas para este cambio.

 

Más de 3 millones de habitantes

El último censo de Inegi (2020) registró casi 3 millones de habitantes en San Luis Potosí. Para 2024 se contabilizaron 36,827 nacimientos, y tan solo ese año ocurrieron 27,719. Considerando el comportamiento de los últimos periodos, y sumando los nacimientos proyectados de 2025, la población estatal habría crecido aproximadamente entre 45,000 y 55,000 habitantes adicionales desde 2020, por lo que en 2025 el estado rondaría los 3.05 millones de habitantes.

Pero ese crecimiento ya no proviene de las nuevas generaciones. Las generaciones jóvenes, particularmente la Generación Z y los Millennials tardíos, están eligiendo no tener hijos. Prefieren proyectos personales o incluso la tendencia conocida como “perrhijos”, lo que ha dejado a guarderías, kinders y primarias con matrículas insuficientes.

La crisis es tan seria que desde 2020 se han cerrado varias escuelas, especialmente jardines de niños y telesecundarias, al no cumplir con el mínimo de estudiantes requerido para sostener grupos y planteles completos. San Luis Potosí dejó de ser una entidad joven.

 

Crecimiento de población adulta

Entre 2010 y 2020, la población adulta mayor creció 12.8%, pasando de 257 mil 976 a 361 mil 599 personas. En 2025, se estima que la cifra podría llegar a 395 mil adultos mayores para finales de este mismo año. Las proyecciones muestran un panorama contundente, pues para 2030 se estima que el 15% de la población será mayor de 60 años; para 2040 subirá a 18.6%; en 2050 a 22.2%; y en 2070, más de 1 millón de adultos mayores en el estado.

 

Déficit de geriatras y asilos en SLP

A la luz de estas cifras, el bono demográfico está llegando a su límite, y lo hará mucho antes de lo previsto; mientras el número de adultos mayores crece, el estado no tiene la infraestructura ni la preparación para atenderlos. La realidad médica es alarmante:

En todo San Luis Potosí solo existen 13 geriatras certificados; para 2035, se proyecta que habrá 540 mil adultos mayores, por lo que con la cifra actual de especialistas, cada geriatra tendría que atender a más de 41 mil personas.

Esta falta de formación especializada revela una brecha enorme entre las necesidades reales de la población y la capacidad del sistema de salud. Paradójicamente, mientras la infancia cuenta con amplia oferta de pediatras, guarderías y escuelas, la vejez, que ya domina la pirámide poblacional, carece de atención especializada, infraestructura de cuidados, centros integrales, programas de movilidad y médicos formados en geriatría. A esto se suma que el estado solo tiene 14 asilos registrados ante el Instituto Nacional de las Personas Adultas Mayores (INAPAM), varios de ellos con denuncias por maltrato y sin regulación sanitaria efectiva.

 

Esperanza de vida

La esperanza de vida al nacimiento en San Luis Potosí ha mostrado una tendencia al alza en los últimos años. En 2025, se estima que la esperanza de vida es de 75.5 años, ligeramente por debajo del promedio nacional de 75.7 años. Sin embargo, se carece de infraestructura para la atención del sector de adultos mayores, ya que por ejemplo para la atención médica, todavía deben ser canalizados a Medicina Familiar por falta de especialistas en Geriatría.

Esto significa que la población vivirá más tiempo pero en un entorno con poca atención geriátrica.

 

Los próximos 10 años, ¿Qué demanda enfrentará San Luis Potosí?

En los próximos 10 años ante el comportamiento actual del crecimiento poblacional la demanda que enfrentará San Luis Potosí será en salud geriátrica urgente buscando una acelerada formación de expertos geriátricos también centros integrales de atención crónica rehabilitación cuidados paliativos y Salud Mental enfocada en la vejez.

Además habrá una reconfiguración educativa ya que habrá cierres de escuelas por falta de matrícula esto ante el decrecimiento de la población infantil por lo que habrá una reorientación de docentes hacia otros niveles o especialidades.

Se necesita una infraestructura social para la vejez, como asilos regulados y centros de día; programas de movilidad, accesibilidad y vivienda adaptada; y redes comunitarias de acompañamiento.

Economía y fuerza laboral: Habrá menor población joven disponible para trabajar; habrá un mayor peso financiero en pensiones y servicios de salud; y la necesidad de políticas de retención laboral para adultos mayores.

Planeación urbana y transporte: ciudades más accesibles, seguras y funcionales para personas mayores; además ajustes en rutas, banquetas, espacios públicos y trámites gubernamentales.

El envejecimiento poblacional también es una ventana de oportunidad. La geriatría podría convertirse en una de las especialidades con mayor demanda en los próximos años, superando incluso a la pediatría. Si las nuevas generaciones médicas piensan a futuro, encontrarán un campo laboral amplio, urgente y en crecimiento.

 

El reloj demográfico ya está corriendo

Ante toda esta información, si no se actúa desde ahora, San Luis Potosí corre el riesgo de convertirse en un estado envejecido sin especialistas, sin infraestructura y sin políticas integrales para cuidar a su población; por ello es fundamental que las instituciones gubernamentales empiecen a preparar políticas públicas enfocadas al crecimiento poblacional, sobre todo al grupo de personas adultas mayores.

 

 

 

 
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