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LA RECIENTE REINGENIERÍA anunciada por el gobernador de San Luis Potosí, Ricardo Gallardo Cardona, en la Dirección de Gobernación busca erradicar prácticas indebidas que han afectado la credibilidad de esta dependencia.
ESTA TRANSFORMACIÓN SE presenta como una respuesta necesaria ante denuncias de corrupción y abuso de poder, donde personal de la Dirección de Gobernación amenazaba con clausuras a pequeños comercios y tiendas de conveniencia.
GUADALUPE TORRES, TITULAR DE la Secretaría General de Gobierno, ha subrayado que estas conductas no son aceptables en una administración que pretende promover la certeza y protección a la inversión.
La Dirección de Gobernación tiene un amplio espectro de funciones, desde la regulación de asociaciones religiosas hasta la supervisión de establecimientos de bebidas alcohólicas.
SIN EMBARGO, SU EFECTIVIDAD ha estado comprometida por una cultura de impunidad que ha permitido que algunos funcionarios actúen al margen de la ley.
LA DEPURACIÓN DEL PERSONAL Y la reestructuración de sus áreas son pasos cruciales para recuperar la confianza pública y garantizar que se cumplan las normativas vigentes.
ENTRE LAS ACCIONES MÁS relevantes, se ha planteado que un perfil femenino asuma la responsabilidad de supervisar el cumplimiento de la Ley Estatal de Bebidas Alcohólicas.
ESTA DECISIÓN NO SOLO representa un cambio de liderazgo, sino también un intento de promover una gestión más ética y responsable.
EL LIDERAZGO FEMENINO EN estas áreas puede aportar una perspectiva renovada y un compromiso genuino con la legalidad y el bienestar de la comunidad.
La reingeniería de la Dirección de Gobernación no es solo una cuestión de limpieza interna; también implica la creación de mecanismos que eviten que se repitan los errores del pasado.
TORRES HA ADMITIDO QUE LA depuración ha generado expedientes de juicio de responsabilidad administrativa contra exfuncionarios, lo que refleja la seriedad con la que se están tomando estas medidas.
LA REVISIÓN DE DESEMPEÑO Y LA reubicación de personal son parte de un proceso que busca no solo castigar, sino también prevenir futuras transgresiones.
EN ESTE CONTEXTO, ES VITAL QUE la nueva dirección no solo se limite a aplicar sanciones, sino que también promueva una cultura de cumplimiento y respeto a la ley en todos los niveles.
LA DIRECCIÓN DE GOBERNACIÓN debe convertirse en un aliado de la sociedad y no en un obstáculo. La colaboración con otras instancias municipales, estatales y federales será fundamental para asegurar que las funciones de esta dependencia se ejerzan de manera efectiva y transparente.
ES EVIDENTE QUE LA transformación de la Dirección de Gobernación es un paso necesario en la búsqueda de un gobierno más justo y eficiente. La sociedad potosina merece instituciones que garanticen sus derechos y contribuyan a un entorno de inversión seguro y regulado.
SOLO ASÍ SE PODRÁ AVANZAR hacia un futuro en el que la legalidad y la ética sean los pilares de la administración pública. La piedra en el zapato que ha sido la Dirección de Gobernación puede, gracias a estos cambios, convertirse en un ejemplo de cómo la voluntad política puede llevar a la regeneración institucional.
HASTA LA PRÓXIMA
