San Luis Potosí, SLP.- La reciente auditoría del Instituto de Evaluación y Fiscalización (IEFE) al sistema de parquímetros del ayuntamiento de San Luis Potosí volvió a encender la discusión sobre la necesidad de actualizar este mecanismo de recaudación, más que sobre presuntas irregularidades. Así lo planteó el alcalde Enrique Galindo Ceballos, quien aseguró que las observaciones técnicas emitidas por el órgano fiscalizador están lejos de configurar un caso de corrupción.
De acuerdo con el edil, el señalamiento principal del IEFE apunta a un monto pendiente de aclaración por 170 mil pesos, cifra que —dijo— representa “una fracción mínima” respecto al total de ingresos que se espera obtener al cierre de 2025, estimados en 28 millones de pesos. El alcalde insistió en que el monto observado se encuentra dentro del rango normal de verificación que acostumbran las auditorías y que, hasta ahora, no hay elementos que revelen manipulación deliberada de los dispositivos.
Galindo también respondió a versiones que sugerían un posible “robo hormiga”. Señaló que el equipo de cobro está blindado contra aperturas no autorizadas y que los procedimientos administrativos cuentan con supervisión permanente. Subrayó que la administración no ha identificado indicios de un esquema interno de desvío o alteración de los recursos generados por los parquímetros.
La discusión, afirmó, debería concentrarse en la urgencia de modernizar el sistema y actualizar tarifas que llevan años sin modificarse. Reconoció que incluso administraciones anteriores intentaron un ajuste que no prosperó, lo que hoy limita la capacidad del municipio para mejorar el servicio.
Mientras avanzan las aclaraciones solicitadas por el IEFE, el ayuntamiento sostiene que aún se encuentra dentro del plazo legal para solventar cualquier requerimiento. Galindo reiteró que el proceso de auditoría seguirá su curso normal y que el municipio entregará la información técnica que sea necesaria para cerrar el expediente.