Tras un repunte durante el verano, la economía de Texas parece haberse enfriado en otoño y los principales índices de la Encuesta de Perspectivas Empresariales de Texas (TBOS, por sus siglas en inglés) indican una desaceleración del crecimiento económico en octubre, y los encuestados reportaron una creciente presión sobre los precios debido a los aranceles.
En un análisis, el Banco de la Reserva Federal de Dallas indicó que los aranceles, junto con la disminución de la inmigración y la mayor incertidumbre política, han afectado la economía de Texas.
"Los aranceles y la incertidumbre política representan riesgos para las perspectivas económicas, al igual que la disminución de la inmigración y el efecto disuasorio de la aplicación de las leyes migratorias.
"La caída de los precios del petróleo es una preocupación adicional. Texas es el principal estado productor de petróleo, y los precios han caído por debajo de los 65 dólares por barril, precio que muchas empresas consideran necesario para perforar nuevos pozos de forma rentable", indicó el reporte.
Mientras que los índices de empleo de la Oficina de Estadísticas Laborales de Texas sugieren una contratación limitada en septiembre y octubre. Los datos sobre el empleo asalariado en Texas, provenientes de la Oficina de Estadísticas Laborales, solo están disponibles hasta agosto debido al cierre del gobierno federal. Estos datos sugieren un crecimiento del empleo estatal del 0.7%, muy por debajo del promedio histórico de Texas, del 2%.
Las empresas informaron que sus precios de venta en septiembre aumentaron 2.7% con respecto a los 12 meses anteriores, en comparación con el 2.5% reportado para los 12 meses que finalizaron en junio. Gran parte de este repunte se puede atribuir a que las empresas trasladaron algunos aumentos en los precios de los insumos.
El crecimiento de los precios de los insumos se había mantenido en torno al 4.1% desde septiembre de 2024, repuntando al 4.6% el pasado septiembre. Los aranceles parecen haber desempeñado un papel clave; casi la mitad de las empresas informaron en agosto que sus costos de insumos aumentaron debido a los aranceles más altos.
La mayor presión sobre los costos elevó las expectativas de precios de venta entre las empresas de Texas. El crecimiento previsto de los precios de venta durante los próximos 12 meses aumentó de 2.8% en junio, al 3.0% en septiembre.
Cabe destacar que alrededor del 40 por ciento de las empresas de servicios -en particular los minoristas- afirmaron que los aranceles les perjudicaron, y el 38% citó el aumento de los costos de los insumos y el 19.1% por ciento los precios de venta más altos.