El sector agroalimentario de Estados Unidos hizo ayer un llamado a renovar el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
La carta, firmada por 124 organizaciones que representan la cadena de valor agroalimentaria estadounidense, incluyendo la Asociación Nacional de Productores de Maíz (NCGA), fue presentada ayer en apoyo a la renovación completa del T-MEC en el marco del proceso de consulta pública para la revisión del acuerdo comercial prevista en 2026.
"Estados Unidos es el mayor exportador agrícola del mundo, y la mayoría de los firmantes consideran a Canadá y México entre sus cinco principales mercados de exportación", señala la carta publicada ayer.
"La integración comercial entre los tres países, fortalecida por acuerdos comerciales anteriores y acelerada por el T-MEC, permitió que las exportaciones agrícolas de Estados Unidos se dispararan".
Los firmantes argumentan que la cooperación comercial entre los tres países ofrece múltiples beneficios. El T-MEC no solo ha impulsado la economía estadounidense, sino que también ha facilitado y agilizado el flujo comercial en los tres países.
Desde que el presidente Trump promulgó el T-MEC el 30 de noviembre de 2018, este ha generado eficiencias en el sector agrícola, con un ahorro considerable para los agricultores, productores y ganaderos estadounidenses, destacaron.
El acuerdo también ha brindado transparencia regulatoria entre los países y ha garantizado un tratamiento científico de los productos agrícolas, en beneficio de la salud animal y vegetal, lo cual ha resultado muy ventajoso para los exportadores estadounidenses.
Un ejemplo de los beneficios del acuerdo se evidenció en 2024, cuando los productores de maíz estadounidenses ganaron una disputa con el gobierno mexicano sobre la prohibición del maíz transgénico, luego de que Estados Unidos iniciara un proceso de solución de controversias en el marco del T-MEC.
Sin el respaldo económico que ofrece el acuerdo trilateral, los ingresos de los agricultores se verían perjudicados, ya que el sector tendría que asumir costos adicionales y onerosos relacionados con el transporte y las medidas de cumplimiento, señalaron los firmantes.
"Sin la certeza que garantiza el T-MEC, las empresas agroindustriales y las explotaciones familiares se enfrentarían a mercados poco fiables y a una menor competitividad global", indicaron.