La producción de obras de infraestructura tendrá una contracción de alrededor de 22 por ciento, anticipó la consultora Forecastim.
Al finalizar este año, el valor de la producción de obras de infraestructura tendrá una contracción de alrededor de 22 por ciento, anticipó la consultora Forecastim.
Ricardo Trejo, director general de la firma, indicó que esta caída estará impulsada por factores como el descenso del gasto público en infraestructura, que ha registrado retrocesos de magnitudes incluso mayores.
Por ejemplo, en el acumulado de enero a agosto de este año, el gasto público en inversión física fue de menos de 510 mil millones de pesos, mientras que en los primeros ocho meses del año pasado se ejercieron 768 mil 426 millones (a valor actual); es decir, una disminución de más de 50 por ciento.
Trejo señaló que esto obedece a que el Gobierno tiene otras necesidades y hay que restablecer las finanzas públicas.
Ante ello, estimó, se esperaría que a partir del segundo trienio de la Administración de la Presidenta Claudia Sheinbaum, es decir, hacia 2027, será cuando se comience a ver un incremento en la producción de obras de infraestructura.
Trejo agregó que otro de los factores que estarían impulsando dicha caída es la incertidumbre que han generado diversas reformas impulsadas por la presente Administración, como la judicial y la Ley de Amparo, entre otras.
"Este Gobierno empezó con una sacudida muy grande con la reforma al Poder Judicial, las diversas políticas del Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y momentos económicos negativos que, desde luego trajeron incertidumbre en la iniciativa privada y el Gobierno", expuso.
En ese sentido, señaló que se tienen que sentar las bases institucionales, legales y de certidumbre para que la iniciativa privada entre a invertir, construir y darle mantenimiento a la obra pública.
Destacó que habrá una caída en términos reales en todo tipo de obras, aunque proyectó que a finales de este año quizá se podría observar un repunte en carreteras.
"Desde luego esa caída en inversiones conlleva a una caída de producción y en la generación de empleos al estar todo encadenado", destacó.
Por último, el especialista subrayó que el año entrante habrá incertidumbre por la revisión del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), en donde el sector privado va a estar a la expectativa de qué va a suceder.
Apuntó que si bien se confía en que va a solucionar en favor de la integración comercial, se desconocen cuáles vayan a ser los términos.
"Hasta que no se conozcan dichos términos, la IP estará a la expectativa y, por lo pronto, va a estar en 'stand by' en invertir en obra. Y si México no establece un sistema institucional estable, es un factor que abona a la incertidumbre", puntualizó.