Opinión
El miércoles 15 de octubre de este 2025 la cámara de diputados aprobó ajustes fiscales al paquete económico 2026. El cual fue presentado por la titular del ejecutivo federal. El gobierno federal necesita 10.1 billones de pesos para cumplir con su proyecto de egresos. Con ingresos estimados de 8.7 y con un muy optimista escenario de crecimiento económico de entre 1.8 y 2.8 %.
Uno de los nuevos impuestos más controversial es el Impuestos Especial Sobre Producción y Servicios. (IEPS) 2026. Que busca recaudar 761 mil 318 millones de pesos. Sobre cigarros, refresco, bebidas endulzadas, alcohol. La SHCP y particularmente la presidenta desde su conferencia matutina desplegó una dinámica comunicacional para hacer creer que este impuesto a estos productos debía ser entendido como “impuesto saludable” bajo la creencia de que un alza o creación de un nuevo impuesto des incentiva el consumo. Nada más falso en un país donde no existe actualmente una política publica integral de salud, que; informe sobre las ventajas de comer sano y beber sano. Que incentive desde la producción de insumos verdes; granos, cítricos, frutas, lácteos. Eso no se hace, el campo y la producción fueron no solo abandonados sino los dejaron a expensas de la delincuencia organizada, como la extorsión. El ejemplo más reciente y triste es por la que atraviesan los productores de limón. Pero igual se encuentran otros productos. No existe esa política que incluya también la prevención de ENT (enfermedades no trasmitibles) como la diabetes, obesidad, presión arterial entre otras.
Le traigo también otra lamentable realidad del consumo de refresco en México. En Chiapas. Existe una correlación preocupante ente los altos índices de pobreza y el elevado consumo de refresco. el INEGI reporta datos sobre la pobreza y los ingresos de los hogares. También se encuentran investigaciones académicas que destacan la relación entre la falta de acceso al AGUA POTABLE y la alta ingesta de bebidas azucaradas en la población más vulnerable. Según el INEGI, en 2025 el 66% de la población de Chiapas vive en pobreza multidimensional. O sea, es el estado con el mayor porcentaje de pobreza, en el segundo trimestre de 2025. La pobreza laboral (ingreso por debajo de la canasta alimentaria) afecta al 62.5% de la población de ese estado. Chiapas es el estado uno de los consumos más altos de refresco en el mundo. Se estima que cada habitante chiapaneco consume un promedio de 822 litros de coca cola al año. Una cifra significativamente mayor que el promedio nacional que es de 160 litros.
¿Cuál es la conexión entre pobreza y consumo de refresco?
Acceso limitado al agua potable. Y no es que sea un estado sin agua, lo que no hay es infraestructura hidráulica y lograr la potabilidad del agua.
El agua embotellada es de difícil acceso y en ocasiones más cara que el propio refresco. Por lo tanto los refrescos son una alternativa más accesible y económica. Acostumbrados al abandono de los gobiernos tanto federal como estatal. El refresco sustituyo toda posibilidad de ingerir bebidas hechas a base de frutas con el hervir del agua que se practicaba en otros tiempos. Tanto ha prevalecido esta conducción del consumo que la publicidad de las empresas es dirigida según las lenguas que hablan las distintas comunidades y poblaciones indígenas. Si. Un “marketing dirigido” la alta incidencia de diabetes, la obesidad y la hipertensión arterial. Se incrementan cada vez mas en la población abordando todas las edades.
El impuesto a refrescos y otras bebidas endulzadas (vendido como “impuesto saludable”) pegara brutalmente en el estado de Chiapas. Precisamente el estado más pobre del país será el que más contribuya a las arcas federales por el impuesto al refresco.
De los millones que recaudará el gobierno federal a través del impuesto al refresco ¿qué porcentaje ira a la salud, infraestructura, prevención, atención, garantía de acceso al agua potable para el estado de Chapas? Ninguno. Así que este aumento y creación de nuevas cargas tributarias y con una narrativa abusiva en la que se le denomina “Impuesto saludable” no lo es. Si es otro engaño más. Donde la arenga populista de “primero los pobres” también es falsaria. Si se tratara de priorizar a quienes viven en pobreza multidimensional o pobreza alimentaria. Por lo menos se tendría que haber diseñado un avance. Uno solo para lograr avanzar en infraestructura y lograr que un porcentaje de la población chiapaneca tuviera acceso al agua potable. Nada han hecho.
Ahora el mal llamado “impuesto saludable” no lo será. Pero además el aumento del impuesto a (cigarros, refrescos) del 200% en cigarros, el 30% en refrescos, afectará no solo los precios al consumidor, sino que también tendrá repercusiones en el empleo, la formalidad y la viabilidad de cientos de miles de pequeños comercios. Provocará una caída en las ventas de entre un 10 y un 15%, aumentará la informalidad (por pequeñas tiendas obligadas a cerrar) y el comercio ilícito (mercado negro) de cigarros. Pues tendrán un importante aumento de ventas los cigarros que llegan al país en la evasión de impuestos o sea “piratas”. Pues se adquieren a bajo costo.
La política pública requiere de diseño, implementación y presupuestación. Y no existe hoy en México una política publica integral (ni no integral) de salud pública. ¿Dóndeestá el recurso que anteriormente se destinaba a infraestructura hospitalaria? ¿Dónde lo relacionado con medicina, estudios, diagnóstico y que el hospital cuente con especialistas? Pues la falta de mantenimiento a los hospitales público ha provocado su deterioro. Los elevadores, camas hospitalarias, insumos, contratación de especialistas, medicamento vaya todo lo que se refiere a la conservación, proveeduría, y etcétera en los hospitales públicos no existe.
Ese recurso está en programas electorales que no programas sociales. El programa social debe contemplar ser integral, o sea deben ser de “CO Inversión Social) ningún programa actualmente es de coinversión social.
Cuestiono y hago critica de este engaño de “impuesto saludable” porque no se ha reflejado en un solo acto de gobierno, ni en política pública de salud. La educación, la prevención, la inversión en infraestructura médica y hospitalaria son los medios más eficaces para reducir el consumo de productos nocivos, y no el aumento de impuestos con la mentira de ser un “impuesto saludable”
Para 2026 el pequeño comercio se verá afectado, menores ingresos, competir con las grandes cadenas, resistir la inseguridad, y hacer frente a una carga fiscal mayor.
El otro gran problema que atraviesa todo el tema del aumento y/o creación de nuevos impuestos es la industria azucarera mexicana. Su situación es terrible. La Unión Nacional de Cañeros mostraron que durante el ciclo 2024-2025 los ingresos de los productores de caña han presentado una caída estimada del 27% frente al ciclo previo. Lo que equivale a una perdida alrededor de 14 mil millones de pesos. Hay que decir también que la caña mexicana se produce a partir de cultivos no genéticamente modificados. Y solamente esta calidad es un tema clave en el mundo. ¿Quién y a qué precio de compra la caña mexicana?
Así que más allá de la narrativa falsaria del populismo que gobierna en México. El engaño, el abuso de la narrativa sucumbe ante el golpe de realidad que se vive en comunidades, municipios y estados, la marginalidad y el abandono, la situación de pobreza extrema dan en un palmo de narices a la narrativa que se usó y de la que se abusó (otra vez) para la creación y el aumento de impuesto a cigarros, refresco, y bebidas endulzadas.
Esto es lo que hace un partido en el gobierno que dice “primero los pobres” y que dice ser “un gobierno humanista”
No. No todo esta perdido Tenemos un ejemplo fresco y radiante de la generación que ha derrocado 2 gobiernos; Nepal y Bangladés. Esa generación Z que nos ha dado un hilo de reflexión, un llamado de atención para quienes solo gustan ver pasar el mundo, las injusticias, la violencia y la normalización de la mediocridad.
Hasta la próxima.