A ocho días del desbordamiento del río Cazones, las calles de colonias como Gaviotas, Independencia, Lázaro Cárdenas y sectores aledaños siguen cubiertas de lodo, basura y escombros.
Los vecinos aseguran que el agua todavía les llega a los tobillos y que la ayuda institucional no ha alcanzado a estas zonas, donde el olor a humedad, el riesgo sanitario y la frustración aumentan.
Los habitantes duermen en azoteas y otros abarrotaron los hoteles de Poza Rica y Papantla.
Colchones enlodados, refrigeradores inutilizados, sofás mojados y comedores rotos lucen amontonados en las calles de estas colonias populares.
"Nosotros mismos estamos sacando el lodo con cubetas, pero ya no tenemos dónde ponerlo. Lo que pedimos es que se lleven los escombros para poder seguir limpiando", explicó don Miguel Ángel Navarro, vecino de la calle Cóndor, en Gaviotas.
"Esto estuvo peor que en el 99, por Dios. El agua subió hasta la segunda planta y perdimos todo: refrigerador, cilindros, muebles. Cuando vimos, el agua ya subía por los escalones, en minutos".
La inundación del río Cazones fue una de las más severas desde 1999: anegó viviendas, arrasó vehículos y provocó pérdidas de enseres, indicó el habitante.
La señora Noemí Zamora, vecina de esa colonia, recordó que fueron rescatados por policías en plena inundación, cuando el nivel del agua les llegaba al pecho.
"A las cinco de la tarde nos bajaron con una escalera. Gritaban '¡aviéntese!' y así nos sacaron. Fue horrible. Había casas donde encontraron gente ahogada. Por mi calle apareció un niño y un señor que no quiso salir; se lo llevó el agua. Yo nunca había visto algo tan feo", contó.
Este Municipio fue azotado por las lluvias desde el 9 de octubre, pero el 10 de octubre se reportó el desbordamiento del río Cazones, lo que elevó el nivel del desastre.
Según reportes de Protección Civil, más de 12 colonias fueron afectadas directamente por el desbordamiento, y decenas de familias permanecen entre los restos de sus viviendas, sin que se haya completado la recolección de residuos ni la limpieza de calles.
Por separado, la Marina informó este viernes que la calle Mecatepec, en la colonia Lázaro Cárdenas, ya fue liberada de escombros.
Mientras tanto, en el centro de la ciudad, la Cruz Roja Mexicana instaló un punto de entrega de ayuda humanitaria en el parque central, donde este viernes comenzó la distribución de mil colchones, kits de limpieza y despensas para damnificados.
Desde temprana hora, largas filas de personas esperan su turno para recibir el apoyo.
"Es una ficha por persona", ordenó un integrante de la Cruz Roja.
En el gimnasio Miguel Hidalgo, decenas de integrantes de la Marina y Protección Civil pernoctaron la noche del jueves, tras una jornada de remoción de lodo en el sector central y traslado de víveres.
Los habitantes de las colonias periféricas aseguran que la maquinaria y los camiones no han llegado hasta sus calles y llegan a este punto para pedir el envío de traxcavos.
"Nos dicen que hay apoyo, pero acá no vemos nada", reprocha un vecino de la colonia Gaviotas.
"El agua todavía corre por las banquetas, los perros andan entre la basura y ya empezaron los moscos. Si no se llevan los montones de escombro, esto se va a convertir en un foco de infección", les gritó.
A la fecha, la mayoría de las familias damnificadas continúa sin electricidad ni servicio de agua potable.
Las calles permanecen intransitables por el lodo y los desechos acumulados, lo que impide el acceso de camiones recolectores y retrasa la recuperación, dijo un jefe de cuadrilla del Ayuntamiento.
"Queremos que vengan a sacar la basura, no pedimos otra cosa", insistieron los vecinos.
"Sin eso no podemos ni barrer. Todo lo que sacamos del agua está apilado afuera y empieza a pudrirse. Los niños ya se enfermaron de la garganta y la piel. Nadie nos escucha", reclamaron los vecinos.
En tanto, las autoridades estatales informaron que mantienen operativos de limpieza y desazolve en coordinación con la Secretaría de la Defensa Nacional, la Marina y la Guardia Nacional, pero reconocen que la magnitud del daño ha dificultado cubrir todas las colonias afectadas.
"Vamos por sectores", informó una funcionaria de Protección Civil estatal, entre la desesperación de los inconformes.