Los contribuyentes se quedaron sin ser atendidos. Los empleados del SAT frenaron sus actividades porque dicen que no hay condiciones laborales básicas como limpieza, baños, papel higiénico, elevadores... y además reclaman una imposición de metas desproporcionadas de recaudación.
Los trabajadores de las oficinas recaudadoras de Hidalgo y Paseo de la Reforma en CDMX, así como de Chihuahua, Celaya, Guadalajara y Zapopan, acusaron también falta de personal, horarios extensos, asignación de plazas por favoritismo y la cancelación del aumento salarial que cada año se otorgaba en estas fechas y era retroactivo.
En su pliego petitorio al titular del organismo, Antonio Martínez Dagnino, acusaron que tienen baños están fuera de servicio y que las empresas contratadas para limpieza no proporcionan los materiales básicos, como papel y jabón, para mantener la higiene.
También revelaron acoso laboral, supervisión coercitiva, horarios de trabajo excesivos e imposición de metas de recaudación desproporcionadas, que contravienen principios de dignidad, respeto y justicia laboral.
Ayer, tras 10 horas de protesta, confirmaron que no lograron ningún acuerdo.
Hoy darán servicio normal, reprogramarán citas de contribuyentes afectados y advirtieron que, si no hay respuesta de las autoridades, irán a paro otra vez pero sumando a los sindicatos.