La Presidenta Claudia Sheinbaum cuestionó la violencia suscitada en la marcha del 2 de octubre, donde 94 policías resultaron lesionados por el "bloque negro" y que ocasionó pérdidas millonarias por daños en inmuebles del Centro capitalino.
"¿Qué buscan estos grupos?, ¿de qué sirve esta violencia?, ¿a quién le sirve? Eso es lo que hay que preguntarnos, ¿qué buscaban este grupo que lleva cubierta la cara?, ¿qué buscan?, ¿por qué hacen estas manifestaciones en una ciudad de libertades, de plena libertad?, ¿qué buscaban? Un enfrentamiento con la policía, un enfrentamiento desde mi punto de vista, un 2 de octubre. ¿Qué buscaban con esta posible respuesta de la Policía de la Ciudad? Pues que dijeran: 'un régimen represor, que reprime estudiantes, en un 2 de octubre'", cuestionó.
La Mandataria reconoció a los elementos de la Policía que no cayeron en la "provocación" del grupo de encapuchados, y apuntó que muchas de las acciones son consideradas delitos, por lo que la Fiscalía ya trabaja en el caso.
"¿Qué buscan estos grupos que se cubren la cara? Primero, mi apoyo a los policías que resultaron heridos y su valentía por la contención, es increíble cómo contuvieron sin caer en ninguna provocación con heridas personales, pero hay que preguntarse qué buscan estos grupos, cuál es su intención.
"Es un delito muchas de las cosas que hicieron y ya la Fiscalía de la Ciudad de México tendrá que ver si hay identificación de las personas para poder particularmente cuando hay una agresión a una persona, a un policía, porque se ve en la escena, ellos contenían y la agresión vino de un solo lugar, no vino de otro lugar, vino de este grupo de personas", señaló.
Sheinbaum reiteró su rechazo a la violencia de la marcha y acusó que los grupos extremos se juntan.
"Nosotros no estamos de acuerdo, nunca vamos a estar de acuerdo con manifestaciones violentas, menos en una ciudad de libertades, como es la Ciudad de México, en un país de libertad, como es nuestro País. Pueden no estar de acuerdo con el Gobierno, pero esta agresión a las personas, a periodistas, tiene que revisarse, y la Fiscalía tiene que ver si hay identificación de unas personas, el llamado a que las manifestaciones sean pacíficas", expresó.
"La pregunta que debemos hacernos tas y todos los mexicanos es: '¿Qué ganan estos grupos y qué buscan?'. Porque los extremos se juntan, los supuestamente muy radicales también se juntan con la derecha, están ahí bien juntitos", agregó.
La Presidenta reconoció que a la Policía capitalina le faltó capacidad para afrontar la situación de violencia, pero destacó que no hayan caído en la provocación, a la que consideró "injustificable".
"Más allá de la crítica constructiva que se pueda hacer a mayor contención que debe de existir frente a situaciones de este tipo, es muy importante que la Policía de la ciudad no haya caído en esas provocaciones, porque de haber caído en la provocación, entonces le hubieran alimentado a toda esta narrativa que traían para ese día.
"Nuestra solidaridad a los policías, a los periodistas, que uno de ellos está en una situación delicada, un policía, a sus familias y la Fiscalía de la Ciudad que pueda revisar sobretodo a esta agresión directa que hubo, que es injustificable. Tendría que abrirse una investigación, tiene que abrirse por parte de la Fiscalía de la Ciudad de México, que ya se abrió, y a partir de ahí, pues hacer las investigaciones", añadió.
El pasado jueves, al final de la marcha que conmemoró los 57 años de la matanza de estudiantes en Tlatelolco, jóvenes embozados se desprendieron de la mayoría de manifestantes y atacaron a los uniformados a un costado de la Catedral Metropolitana.
Los golpearon con piedras, martillos, botellas, cadenas y otros proyectiles; también les lanzaron petardos, bombas molotov y pintura.
Alrededor de 350 personas encapuchadas provocaron daños en inmuebles, además de que participaron en saqueos, cuyas pérdidas eran estimadas al día siguiente en 20 millones de pesos.
Además, 94 policías y 29 civiles resultaron lesionados. Ayer, Clara Brugada, la Jefa de Gobierno capitalina, informó que todavía cinco agentes permanecían hospitalizados.