Las negociaciones entre Taylor Swift y la NFL para que encabezara el espectáculo de medio tiempo del próximo Super Bowl fracasaron tras una serie de desacuerdos. La cantante solicitó quedarse con la propiedad total de la grabación de su actuación, lo que le daría derecho a regalías cada vez que se difundiera su presentación, además de pedir espacios publicitarios gratuitos para promocionar sus proyectos, según reveló el periodista Rob Shuter en su pódcast Naughty But Nice.
La liga, sin embargo, rechazó estas condiciones por considerarlas inviables. De acuerdo con Shuter, la NFL esperaba que el atractivo del evento fuera suficiente para que los artistas aceptaran sin mayores exigencias, pero Swift buscaba un acuerdo acorde a su valor en la industria. “Ella no necesita el Super Bowl, pero el Super Bowl la necesita a ella. Sin Taylor, sería solo otro espectáculo de medio tiempo”, señaló el periodista.
Con la salida de Swift, surgió el nombre de Adele como la principal candidata para encabezar el show del Super Bowl LX, programado para el 8 de febrero de 2026 en el Levi’s Stadium de Santa Clara, California. Medios estadounidenses reportaron que la artista británica estuvo en pláticas para confirmar su participación, lo que generó gran expectativa entre sus seguidores.
No obstante, diversas fuentes aseguran que Adele finalmente rechazó la invitación por segunda vez. Al igual que en 2016, la cantante habría considerado que el evento no le permitiría expresarse libremente como en sus propios conciertos. Además, influyó su preocupación por la seguridad en grandes eventos públicos, un tema que ha cobrado mayor relevancia en años recientes.
En su primera negativa, Adele explicó que el Super Bowl era, en esencia, un espectáculo deportivo y no un show musical donde pudiera sentirse plenamente cómoda. Esa misma visión, sumada a sus reservas actuales, la llevó nuevamente a apartarse del concierto televisado más grande del mundo.
Con la renuncia de ambas estrellas, el escenario sigue abierto y los fanáticos ya especulan sobre quién podría ser elegido. Entre los nombres que más suenan se encuentran Miley Cyrus y la banda Metallica, aunque hasta el momento no existe ninguna confirmación oficial por parte de la NFL.
