El grupo islamista Hamás dijo que cinco de sus miembros han muerto en el ataque israelí contra Doha (Catar), aunque ninguno de ellos formaba parte de su delegación negociadora.
"Confirmamos el fracaso del enemigo en asesinar a nuestros hermanos de la delegación negociadora. Mientras tanto, varios de nuestros hermanos mártires han ascendido a los más altos rangos de gloria", dijo el grupo en un comunicado, en el que incluye los nombres de los cinco asesinados.
Entre los fallecidos se encuentran Hamam Khalil al Hayya, el hijo de Khalil al Hayya (que dirige la delegación negociadora de Hamás), y Yihad Labad, el director de la oficina del jefe negociador del movimiento palestino.
Además, perdieron la vida tres "acompañantes": Abdulá Abdul Wahid, Moamen Hasuna y Ahmed al Mamluk.
También murió un miembro de las fuerzas de seguridad cataríes, Bader Saad Mohamed al Humaidi al Dosari, cuyo fallecimiento ya había sido confirmado por el Ministerio del Interior catarí.
Los islamistas condenaron el bombardeo, que definieron como una "violación flagrante de todas las normas y las leyes internacionales".
"Este crimen constituye un ataque a la soberanía del Estado hermano de Catar, que, junto con el hermano Egipto, juega un papel importante y responsable" como mediador en las negociaciones para lograr un alto el fuego en la Franja de Gaza.
Hamás dijo que la decisión de Israel de atacar a los líderes del equipo negociador palestino mientras discutían la última propuesta de alto el fuego de Estados Unidos demuestra que las autoridades israelíes "no quieren alcanzar ningún acuerdo".
El grupo avisó también de que el intento de asesinato no modificará sus requisitos para un acuerdo en Gaza, que pasan por el fin de la ofensiva, la retirada total de las fuerzas israelíes de Gaza, el intercambio de rehenes por presos palestinos en Israel y la reconstrucción del enclave.