San Luis Potosí, SLP.- Antes de ser aprobada por los diputados del Congreso local, la reforma a la Ley Orgánica del Poder Judicial del Estado (PJE) debe analizarse con extremo cuidado para evitar confusiones o interpretaciones erróneas por parte de los magistrados que integrarán el nuevo Tribunal de Disciplina, advirtió Jorge Chessal, presidente de la Barra Mexicana de Abogados (BMA), Capítulo San Luis.
El especialista explicó que la norma debe definir con precisión un catálogo de conductas sancionables o, en su defecto, establecer un mecanismo de vinculación directa con la Ley de Responsabilidades de los Servidores Públicos.
“Pero no un esquema mixto, uno que provoque que los magistrados del tribunal disciplinario tengan que ir de una ley a otra, porque eso genera el riesgo de una situación interpretativa individual”, subrayó.
De acuerdo con Chessal, este tipo de ambigüedades pondría en riesgo la actuación ecuánime e íntegra de los integrantes de la corte disciplinaria, al enfrentarse a un marco jurídico complejo, confuso y sin claridad.
En contraste, señaló que lo que más necesita el nuevo PJE es contar con reglas claras desde el inicio de sus funciones. La reforma a la Ley Orgánica del Poder Judicial será sometida a votación en el pleno del Congreso del Estado el próximo 15 de septiembre.