Un caso judicial en Estados Unidos ha generado amplia controversia en torno a la identidad de género y los derechos parentales. Harrison Tinsley, padre de un niño de 4 años, obtuvo recientemente la custodia total de su hijo luego de una prolongada batalla legal contra la madre.
El origen del conflicto
De acuerdo con Tinsley, la madre —quien se identifica como lesbiana no binaria— habría decidido criar al menor bajo una identidad no binaria desde su nacimiento, asignándole el pronombre “elle” y alentándolo a usar vestidos, maquillaje y pañales de niña.
El padre denunció que, durante los primeros 15 meses de vida del niño, se le impidió tener contacto con él. No fue sino hasta que una corte intervino que pudo verlo por primera vez.
El fallo judicial
Tras varios años de disputa en tribunales, la corte determinó otorgar a Tinsley la custodia total del menor. La decisión fue considerada por el padre como una victoria no solo personal, sino también en contra de lo que describió como la “imposición de ideología de género” sobre su hijo.
Debate público
El caso ha reavivado el debate en Estados Unidos sobre la crianza de menores en contextos de identidad de género no binaria, así como los alcances de la autoridad de los padres frente a las decisiones sobre cómo educar y presentar a sus hijos en temas de género.
Mientras algunos sectores consideran la resolución judicial como una defensa del bienestar infantil, otros la ven como un retroceso en el reconocimiento de identidades diversas.