negocios

Sufren desunión empresas familiares

De acuerdo con Family Firm Institute, el 87 por ciento de los fracasos se debe a conflictos internos y desunión, no a problemas financieros

En México, más del 90 por ciento de las empresas familiares desaparecen antes de llegar a la tercera generación. Aunque se suele culpar al entorno económico o a la falta de financiamiento, la causa más común de su extinción es mucho más cercana: la familia misma.

De acuerdo con Family Firm Institute, el 87 por ciento de los fracasos se debe a conflictos internos y desunión, no a problemas financieros.

"En otras palabras, lo que destruye los patrimonios no es el mercado, son las decisiones postergadas y los vínculos mal gestionados", afirma Jorge Arellano, autor del libro "Empresas familiares que trascienden" y asesor en blindaje patrimonial.

Enfatizó que el verdadero enemigo no está en la competencia o en la falta de ingresos, sino el exceso de silencios; es decir, la falta de planeación por el temor a hablar del plan de sucesión de la empresa.

"En promedio 70 por ciento de las empresas en México no pasan a la segunda generación, es una cifra muy dura. No obstante, sí veo cada día más esfuerzos.

"Por ejemplo, el esfuerzo que hacen muchas instituciones educativas, muchas escuelas de negocios que están fomentando el conocimiento de cómo profesionalizar la empresa familiar. Eso, tarde o temprano va a tener un impacto positivo a las empresas del País", dijo Arellano en entrevista.

No obstante, advirtió el autor, es preocupante que entre 85 y 90 por ciento de la población en el País sigue sin hacer un testamento, una situación que se extiende a las empresas, ya que la mayoría carece de plan de sucesión. 

"Hay una encuesta del Instituto Panamericano de Alta Dirección de Empresa (IPADE) donde muestra que el 60 por ciento de los egresados no tiene testamento y eso que tienen la cultura de negocios", expuso Arellano.

"Además, cerca del 67 por ciento no tiene reuniones como familia empresaria, el 85 por ciento no realiza sesiones de consejo. 

"Es más, ni siquiera tienen consejo consultivo las empresas. Entonces, a pesar de que hay un aumento en la información en los medios, en las escuelas de negocios, hoy por hoy la empresa familiar sigue estando muy poco profesionalizada", apuntó. 

El autor dejó en claro que el inicio del fin para las empresas es cuando el dueño de empresa posterga la decisión de generar un plan de sucesión. "Ahí ya empezó el fracaso de la empresa familiar, porque mientras más tiempo postergues el tomar acción para profesionalizar y hacer esa sucesión exitosa, pues obviamente el porcentaje de éxito baja", puntualiza.

OTRAS NOTAS