El Consejo General del Instituto Nacional Electoral (INE) aprobó un nuevo modelo de la credencial para votar, la cual tendrá más medidas de seguridad a partir del próximo año.
"La actualización del modelo de la credencial para votar en territorio nacional y en el extranjero responde a la necesidad de mantener estándares tecnológicos y de seguridad acordes con las mejores prácticas internacionales.
"En este contexto, el INE ha llevado a cabo un proceso de contratación de una nueva empresa encargada de la producción de las credenciales, asegurando la continuidad y mejora en la calidad del servicio", explica el acuerdo aprobado en sesión.
La actualización de la credencial para votar busca fortalecer elementos para blindar a este documento de riesgos de falsificación, alteración, duplicación, diversificación y simulación.
En la credencial para votar en territorio nacional se decidió mantener como material central el sustrato Teslin" u otro material que proporcione las mismas o mejores características, y cuya durabilidad deberá ser como mínimo 10 años; así como el poliéster "Transkote MR 7/3" u otro similar que cumpla con las características de recubrimiento para el laminado del documento.
En cuanto a los elementos de seguridad se consideran al menos los siguientes: recuadros con microtexto; elemento Ópticamente Variable (OVD por sus siglas en inglés); tinta termocromática, termoreactiva o infrarroja; diseño de seguridad de alta resolución; y elemento táctil que facilite la identificación de la CPV para personas con debilidad visual.
Sobre la distribución y tamaño de los datos, se mantiene a 50 el número de caracteres para los nombres y apellidos de sus titulares, con el fin de maximizar el derecho de identificación de la ciudadanía, al insertarse el nombre completo.
También se mantiene la denominación del código identificador OCR, conformado por la "Sección", seguida del dato identificador de la ciudadana o el ciudadano, el cual consiste en un número consecutivo designado a cada uno de sus titulares con fines de identificación.
Igualmente, permanecen los códigos de barras tradicionales, así como códigos bidimensionales QR de alta densidad para el almacenamiento y acceso rápido, con la finalidad de brindar un control de información acotada y pública, y así tener la posibilidad de verificar la autenticidad de la credencial.
Además, el código bidimensional QR de alta densidad permitirá almacenar datos de forma comprimida y encriptada.
En el reverso se incorpora una fotografía digital de la ciudadana o del ciudadano.