El equipo de natación artística ha dado muchas alegrías a España en el Mundial de Singapur, donde ha lucido alta costura bajo el agua diseñada por Mercedes Cerdán, inspirada en la música de Celine Dion, Lady Gaga y los Backstreet Boys con la que han triunfado en el medallero.
«El diseño definitivo es un trabajo en equipo, en el que es determinante la música, pero sobre todo la temática y a partir de ahí aportan su opinión las nadadoras y las entrenadoras», señala a EFE Cerdán, creadora de los bañadores de las deportistas desde 2016.
«Cuando ellas se sienten guapas y seguras con la prenda hacen el ejercicio mejor», sentencia la diseñadora.
«Son para verlos de cerca»
Iris Tió (Barcelona, 2002) ha hecho historia al alzarse con la medalla de oro en el solo libre de natación artística en el Mundial de Singapur en el que ha competido bailando ‘Himno al amor’, la canción de Edith Piaf, que versionó Celine Dion en la ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos de París en 2024, un momento en el que la cantante en el que lució con diseño de Dior, que necesitó un trabajo de 1.000 horas.
«Queríamos simular esa elegancia e incluimos una flor en el pelo, que lleva también el bañador», señala Cerdán. «Nuestros bañadores son para verlos de cerca, alta costura bajo el agua», con gomas de gran calidad que permiten que perduren en el tiempo y que sigan utilizando las junior del equipo.
La diseñadora catalana asegura que no tiene en cuenta ni el diseño de otros bañadores, que recurren a mucho colorido, ni los maillots de gimnasia rítmica.
«Nos gusta ir más allá, inspirarnos, no copiar, en vestidos de pasarela y diseños con una espalda bonita» y subraya que «de llamar la atención a quedar ordinario, hay un paso muy corto» .
Unas normas estrictas
Pero no todo vale, advierte, para participar en este despliegue de moda, belleza y deporte de alto nivel. La normativa de la competición marca unas reglas claras como la altura del corte de pierna, para que el jurado pueda observar cada ejercicio y que permite que la extremidad parezca más larga y estilizada.
Normas estrictas que hasta hace muy poco no permitían que el ombligo quedara al descubierto; ahora se puede ver a través de una malla transparente.
«Sabemos lo que hay que potenciar, la espalda es una parte del cuerpo muy trabajada que debe de quedar muy atractiva. Además, no olvidemos que ante todo deben de ser cómodos», señala Cerdán.
A las deportistas les gusta ir muy ajustadas -cuenta- «y que los bañadores brillen», piezas de alta calidad que pegan al textil con calor o ultrasonido, que no pueden pasar desapercibidas para que luzcan en el agua. «Las piedras más grandes van cosidas a mano», detalla.
Es el caso de los bañadores del equipo de natación artística que ha ganado la medalla de bronce de la rutina técnica por equipos, inspirados en el grupo Backstreet Boys, de quienes bailaron ‘Every body’, un diseño en negro, con grandes cristales cosidos a mano, «bien fuerte para que no se caigan»; el lado izquierdo simula una chaqueta, «una prenda habitual en sus conciertos».
La canción de Lady Gaga ‘Abracadabra’ es la que ha marcado la coreografía del apartado de la rutina de acrobacias, en la que las deportistas junto a Dennis González, han lucido un diseño inspirado en la cantante norteamericana, en el que cada bañador lleva dos metros de tul, que gira alrededor del cuerpo con drapeados, «un peso añadido al ejercicio», subraya la creadora profesora en el IED (Instituto Europeo de Diseño).
Una coreografía para la que también ha creado 10 bañadores blancos, todos diferentes «muy sexis».