San Luis Potosí, SLP.- Desde las primeras luces del alba, el fervor se hizo presente entre los fieles potosinos que este 29 de julio rindieron homenaje a Santa Marta, hermana de María y Lázaro, figura bíblica recordada por su profunda fe y su incansable servicio. En distintos puntos de la ciudad, pero especialmente en templos dedicados a ella, se escucharon mariachis entonando “Las Mañanitas” desde las 6:00 horas, mientras los fieles encendían veladoras, llevaban flores y ofrecían plegarias llenas de esperanza.
Santa Marta es reconocida en la tradición cristiana como una mujer de fe firme y activa, quien abrió las puertas de su casa en Betania a Jesús, demostrando con acciones su amor y entrega. Su figura, ligada a la hospitalidad, la fortaleza y la confianza en los momentos difíciles, ha sido venerada durante siglos por quienes buscan consuelo, milagros y protección ante los desafíos de la vida.
En San Luis Potosí, donde la religiosidad popular tiene raíces profundas, la devoción a Santa Marta ha crecido con los años. Muchas personas aseguran haber recibido favores especiales, desde la sanación de enfermedades hasta la solución de problemas económicos o familiares. Se le invoca como intercesora poderosa en causas urgentes, incluso como “patrona de los imposibles”.
Durante la celebración de este año, se realizaron misas, procesiones, rezos del rosario y momentos de reflexión. En muchos hogares potosinos se montaron altares en su honor, decorados con flores moradas y blancas, símbolos de fe y pureza.
“Santa Marta es una santa muy milagrosa. Cuando todo parece perdido, ella intercede. Yo le debo la salud de mi hijo, y por eso cada año vengo a agradecerle”, compartió doña Esperanza, una devota que lleva más de veinte años acudiendo al templo del barrio de Tlaxcala para celebrar su festividad.
Entre las oraciones más populares dedicadas a Santa Marta se encuentran:
Oración a Santa Marta para casos difíciles:
“Santa Marta, gloriosa entre los santos, tú que tuviste el privilegio de hospedar en tu casa a Jesús, intercede por mí en esta necesidad que tanto me aflige (hacer la petición). Con tu poderosa intercesión, ayúdame a confiar, a no desesperarme y a esperar con fe. Amén.”
Oración tradicional de los nueve martes:
“Santa Marta bendita, madre celestial, yo me acojo a tu protección y te pido con humildad: alivia mis angustias, fortalece mi espíritu y ayúdame a lograr la paz en mi vida. No me dejes solo(a) en esta lucha. Amén.”
La fe potosina volvió a desbordarse en esta jornada, recordando que más allá de los templos, Santa Marta vive en cada acto de hospitalidad, en cada gesto de servicio desinteresado, y en la confianza plena en que lo imposible también tiene solución.
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