La película fue retirada de cartelera pocos días después de su estreno y Buñuel recibió amenazas de expulsión
Cuando Luis Buñuel estrenó Los Olvidados en 1950, su retrato de la pobreza urbana fue considerado provocador. La película fue retirada de cartelera pocos días después de su estreno y Buñuel recibió amenazas de expulsión.
Setenta y cinco años más tarde, ese mismo filme (considerado por la UNESCO como Memoria del Mundo por su valor histórico y cultural) vuelve a examinarse desde una mirada contemporánea en Memoria de Los Olvidados, un documental dirigido por el español Javier Espada y producido ejecutivamente por el mexicano Izrael Moreno.
El filme tendrá una proyección en la 82 edición de la Mostra, dentro de la sección Venice Classics, dedicada a documentales sobre el cine y a versiones restauradas de obras fundamentales.
"La película es una reflexión de la cinta más icónica de Luis Buñuel. En el documental aparecen personalidades del cine y del ámbito cultural muy importantes, y uno puede ver qué tan cercana la película de 1950 es en la actualidad respecto al fenómeno del que hablaba el cineasta en ese momento", explicó Moreno en entrevista.
El documental reúne entrevistas a cineastas, escritores e investigadores como Alejandro G. Iñárritu, Elena Poniatowska, Juan Villoro, Michel Franco, Ofelia Medina, Fernando León de Aranoa, Armando Casas, Iván Ávila Dueñas, Valeria Camporesi, Fernando Méndez-Leite y Dave Kehr, y una participación en voz en off de Arturo Ripstein.
Las grabaciones se realizaron principalmente en México y España, así como en Estados Unidos y Francia.
"Cuando conocí a Javier me di cuenta de que es la persona más autorizada sobre Luis Buñuel por todo su conocimiento y toda su investigación. Lleva ya varios documentales sobre el director, nos encontramos de manera fortuita por amigos.
"Me encantó la pasión con la que estaba abordando el proyecto", señaló Moreno, quien ha producido títulos como El Premio (2011), de Paula Markovitch; Dos Fridas (2018), de Ishtar Yasin; e Identidad Tomada (2020), de Gabriel Retes.
Además de las conversaciones a cuadro, el equipo documentó los barrios de Ciudad de México que aparecen en Los Olvidados (La Romita, Peralvillo y la Roma) y contrastó las imágenes actuales de estos lugares con fragmentos del filme original, gracias a la copia restaurada facilitada por la Filmoteca de la UNAM.
"Las obras fílmicas, y en particular los documentales, tienen algo muy interesante: generan memoria. En la película podemos ver algunos barrios icónicos de la Ciudad de México retratados en la actualidad. Es muy revelador comparar las imágenes de 1950, donde pasaba el tren, con lo que hoy es una de las zonas con mayor gentrificación. Eso muestra el efecto y el poder del cine, que se convierte en una herramienta antropológica", apuntó Moreno.