La empresa de reparto, Rappi, aseguró que no elevará los precios que pagan sus usuarios a pesar de la aplicación de la reforma para formalizar a repartidores y conductores.
"Ante los recientes cambios en el marco regulatorio mexicano, realizamos un análisis riguroso de su posible efecto sobre nuestra operación y los precios al consumidor.
"La conclusión para nosotros es clara: bajo las actuales circunstancias estos ajustes no generarán un incremento en los precios que pagan nuestros usuarios", advirtió en un comunicado.
Aseguró que tomó esta decisión porque quiere seguir siendo la mejor opción para los mexicanos.
"Seguiremos atentos a la evolución del entorno económico y regulatorio, para tomar decisiones sostenibles que cuiden tanto nuestra viabilidad como negocio, pero sobre todo el beneficio de repartidores, aliados y clientes", subrayó.