Imágenes desde el zócalo
Se ha dicho que Hernán Bermúdez Requena, quien fuera secretario de Seguridad Pública en Tabasco, salió del país el 26 de enero pasado; también se anunció que es buscado por la Interpol en 190 países. Sin embargo, otras versiones afirman que pudo haber fallecido el pasado 17 de julio del 2025. El ex funcionario enfrenta una orden de aprehensión por presuntos vínculos con la organización criminal “La Barredora”, ligada al CJNG, que asedia ferozmente a dicho estado desde hace varios años.
De acuerdo con datos del Sistema Nacional de Seguridad Pública, del 2019 -cuando Bermúdez Requena asumió el cargo- a la fecha, los homicidios dolosos en la entidad aumentaron 31 por ciento; los secuestros un 34 por ciento; las extorsiones un 28 por ciento y el narco-menudeo un 219 por ciento. Según cifras del INEGI, en abril pasado, Villahermosa ocupó el primer lugar en percepción de inseguridad, por arriba de Culiacán y Fresnillo. Adicionalmente, el robo de combustible en Tabasco se ha disparado. Este año suman16.8 millones de litros, con lo que se consolidó como uno de los principales centros de venta y distribución del llamado “Huchicol”.
Dado que Bermúdez llegó a dicho cargo durante la administración del actual coordinador de los Senadores de Morena, cabe preguntarse si el inusitado revuelo que ha tenido la noticia, ¿se trata realmente de una cruzada contra el crimen? ¿O es simplemente un conflicto político al interior del grupo gobernante? ¿Es el señalamiento a Bermúdez Requena, un intento real por acabar con la corrupción política y la consecuente inseguridad que por ella impera en el país? ¿O sólo la presentación del “eslabón -actualmente más débil- de la cadena”, que el gobierno mexicano pretende entregar como “tributo” a la administración estadounidense, frente a su nueva amenaza por imponer aranceles del 30%? ¿Acaso el gobierno mexicano usará el tema “Tabasco” para atajar la narrativa imperante sobre el narco-gobierno? Veremos
Al promulgar la nueva ley contra el fentanilo, Donald Trumpaseguró que “los cárteles del narcotráfico ejercen un control tremendo sobre México y sobre sus políticos”, sin embargo, más allá de la tensión bilateral, ¿cómo sociedad, estamos concientes de lo enraizado de la actividad criminal, los cuantiosos recursos que maneja y la penetración que alcanza en la sociedad?
No solo se trata del tráfico de fentanilo, tan sólo la semana pasada se publicó que la Agencia Nacional de Aduanas de México ha asegurado alrededor de 50 millones de litros de diésel que se ha intentado introducir ilegalmente -sin pagar impuestos- al país en los últimos cinco años. Esta práctica, conocida como “huachicol fiscal”, ascendió a 2,320 mil millones de dólares en 2024. Por otra parte, aunque se han destinado recursos para atender “las causas” y evitar que los jóvenes caigan en actividades delictivas, el Inegi confirmó que alrededor de 33 mil adolescentes fueron imputados en 2023 por la presunta comisión de algún delito, lo que representa un 45% más que en 2021.
Sobre el caso Tabasco, no deberíamos conformarnos con una narrativa que parece más un desajuste de la clase política, que una intención real de resolver las cosas de fondo. No nos distraigamos.
Hoy más que nunca, requerimos de una sociedad despierta, que se informe de manera integral y consciente, para discernir entre lo trascendente y lo llamativo pero insignificante. Ante el cúmulo de noticias que conocimos la semana pasada, las verdaderamente alarmantes, resultan ser las medidas que emprendieron algunos integrantes del grupo en el poder, en contra de las garantías constitucionales de información y expresión.
Recordemos que, por un lado, una jueza de control prohibió al periodista Jorge Luis González Valdez, referirse a la gobernadora Layda Sansores y ordenó que haya interventores que revisen qué puede publicar el diario “Tribuna” y que no. Por otro lado, tengamos presente que el Tribunal Electoral (TEPJF), por supuesta “violencia de género”, obligó a una ciudadana a ofrecer disculpas por 30 días a una diputada federal (“Dato Protegido”), después de haberla criticado en redes. Ambas, son decisiones que golpean de raíz, la libertad y la verdad, que deben imperar, para corresponsabilizarnos en resolverlos problemas que nos aquejan.
La #SociedadHorizontal debe levantar la voz y exigir un alto inmediato a estos terribles excesos; de continuar con ellos, se reproducirán anárquica y exponencialmente, los “dictadorzuelos” entre quienes pretenden gobernarnos. El surgimiento de una #NuevaRepública, depende de ello.