El Conejo Malo inició su gira "No me quiero ir de aquí" con una serie de espectaculares conciertos en su país natal, donde ha invitado a distintas personas del medio artístico
El icónico cantante puertorriqueño Ricky Martin, conocido mundialmente por éxitos como "Livin’ la Vida Loca" y su destacada carrera que abarca más de tres décadas, vivió recientemente una experiencia especial como fan junto a su hijo mayor, Santino, de 16 años.
Ambos disfrutaron del concierto del fenómeno global Bad Bunny desde un lugar privilegiado: el propio escenario del Coliseo de San Juan. Este espectáculo forma parte de la ambiciosa gira "No me quiero ir de aquí" que el reggaetonero ha convertido en un evento histórico en la isla caribeña.
El Coliseo de San Juan, Puerto Rico es testigo desde hace semanas de una serie sin precedentes, pues Bad Bunny ofrecerá 30 conciertos durante tres fines de semana consecutivos, con boletos exclusivamente reservados para residentes de Puerto Rico, lo que generó una enorme expectación las y los asistentes, quienes consideran la gira como un ejemplo de cómo un artista puede homenajear sus raíces y su comunidad local.
Bad Bunny sube al escenario a Ricky Martin y su hijo
La unión de estas dos figuras no es una casualidad, pues Ricky Martin ha elogiado abiertamente el talento y la autenticidad del reggaetonero y en esta ocasión no asistió al concierto como espectador, sino que lo hizo desde el escenario, un lugar que el intérprete de "NuevaYoL" reservó para artistas invitados y figuras destacadas con raíces puertorriqueñas.
A sus 53 años, Martin mostró una vez más su energía y su habilidad para el baile, compartiendo el ambiente electrizante que solo un evento de esta magnitud puede ofrecer. Aunque no cantaron, sí fueron protagonistas de un vibrante fragmento del show, captado por múltiples fanáticos que compartieron clips en redes sociales.
Los vídeos rápidamente se volvieron virales, destacando la elegancia y el carisma del cantante de 53 años, quien fue descrito como un "papá orgulloso disfrutando" y "tan radiante como un joven". Los comentarios no solo subrayaron la presencia imponente del artista, sino también el momento de complicidad con Santino, quien posteó fotos y videos del encuentro en sus redes, destacando la conexión que existe en su familia.
Santino y su hermano gemelo Matteo, ambos nacidos el 9 de agosto de 2008 mediante gestación subrogada, forman parte de la familia numerosa de Ricky Martin. Además de ellos, el cantante es padre de Lucía y Renn, sus hijas menores, también nacidas por gestación subrogada, un proceso que Ricky ha defendido públicamente en diferentes entrevistas.
Bad Bunny y su posicionamiento político
Más allá del espectáculo, la residencia de Bad Bunny tiene una carga sociopolítica profunda, pues tal como destaca El País, el cantante utiliza su plataforma para visibilizar problemas como la gentrificación, la corrupción y la creciente dispersión puertorriqueña, en un acto que reivindica la cultura y el sentir local. La residencia, inaugurada el 11 de julio, se diseñó como una respuesta al éxodo masivo: actualmente, más de 6 millones de puertorriqueños viven fuera de la isla, superando a los 3,2 millones que permanecen.
También ha sido interpretada como una especie de mensaje simbólico a Estados Unidos, país que no forma parte de la gira internacional actual (a diferencia de destinos en América Latina, Europa, Asia y Oceanía), lo cual está siendo interpretado como un posicionamiento político del artista.