El rapero Sean "Diddy" Combs vuelve a estar en el centro de la polémica, ahora por una nueva demanda en la que se le acusa de conducta sexual inapropiada durante una supuesta reunión en 2020.
De acuerdo a documentos legales obtenidos por TMZ, un hombre identificado como John Doe presentó una demanda en la que acusa al rapero de masturbarse con una camisa que pertenecía al fallecido Christopher Wallace, mejor conocido como Notorious B.I.G.
El incidente, según la denuncia, habría ocurrido durante una sesión privada de escucha en Los Ángeles, en la que Combs supuestamente presionó al demandante y a otros asistentes para consumir ketamina. Posteriormente, el grupo se trasladó a un almacén donde se guarda la ropa del difunto rapero.
Dentro del lugar, Doe afirma que Combs distribuyó drogas y que, en un momento en el que ambos quedaron solos, el músico comenzó a ver pornografía en su celular, tomó una camisa de Biggie de un perchero y se masturbó frente a él.
La demanda alega que Combs le pidió al demandante que "terminara" con él, pero se adelantó y eyaculó sobre la prenda. Luego, supuestamente arrojó la camisa sobre el regazo del hombre mientras decía: "Descanse en paz, Biggie".
El demandante también menciona un segundo incidente ocurrido en 2005, en el que Combs habría puesto su pene en la cara de él y le exigió que realizara sexo oral.
John Doe está demandando a Combs por agresión sexual, infligir angustia emocional y otros cargos, por los cuales solicita una compensación económica.
Ante las nuevas acusaciones, el equipo legal de Combs emitió una declaración a Page Six asegurando que el rapero "nunca agredió sexualmente ni traficó a nadie" y que "seguirá luchando para limpiar su nombre, por atroces y sin fundamento que sean las afirmaciones".
Esta demanda se presenta apenas una semana después de que Combs fuera absuelto de cargos federales por tráfico sexual y conspiración, tras un juicio de ocho semanas; sin embargo, fue declarado culpable de dos cargos de prostitución, cada uno con una posible pena de hasta 10 años de prisión.
Su audiencia de sentencia está prevista para el próximo 3 de octubre.
Aunque el artista y empresario de 55 años no enfrenta cadena perpetua, aún carga con demandas por conducta sexual inapropiada, violencia y otras actividades ilegales.