Este 3 de julio, Tom Cruise celebra su cumpleaños número 63 consolidado como la última gran superestrella de Hollywood. Con más de cuatro décadas de trayectoria, el actor continúa encabezando producciones millonarias y realizando sus propias escenas de riesgo, una hazaña que lo mantiene vigente en una industria cada vez más dominada por franquicias, efectos digitales y rostros nuevos.
Desde su explosivo ascenso en los años 80 con títulos como Top Gun y Rain Man, Cruise ha demostrado una versatilidad poco común: ha sido piloto, espía, abogado, vampiro y hasta samurái. Pero fue con la saga Misión: Imposible donde cimentó su estatus como icono global, convirtiéndose en sinónimo de acción e intensidad.
Más allá de su talento actoral, Cruise es también productor, estratega y un defensor del cine en pantalla grande. Durante la pandemia, fue una de las voces más firmes en apoyar el regreso a las salas, y con Top Gun: Maverick logró uno de los mayores éxitos de taquilla post-COVID, revitalizando el blockbuster tradicional.
A sus 63 años, Tom Cruise no solo desafía la edad y la gravedad, también desafía las reglas de una industria en constante cambio. En una era donde las estrellas parecen desechables, él sigue siendo la estrella.