Ciudad de México.- El gobierno federal, a través de la Presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, firmó el decreto de incorporación del Programa IMSS Bienestar (originalmente llamado IMSS Coplamar) al Régimen Ordinario del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), un paso histórico que fortalecerá la cobertura médica en comunidades rurales y ampliará la atención a población sin seguridad social en zonas marginadas.
Durante la conferencia de prensa en Palacio Nacional, el director general del Seguro Social, Zoé Robledo, informó que esta firma beneficiará a más de 10 millones de personas, entre ellas también un número importante de personas con seguridad social, asegurando que la atención médica en estas zonas sea regular, eficiente y con mayores especialidades, con la incorporación de las especialidades Otorrinolaringología, Traumatología y Ortopedia, y Oftalmología.
“Se seguirá atendiendo a la población que no tiene seguridad social en estos lugares, la atención será regular con una gran ventaja que podemos hacer hoy, que es tener a IMSS Bienestar en 16 de estos 19 estados. Y también, por el otro lado, continuar con la atención de los derechohabientes en lugares donde también ha crecido mucho el empleo formal”, afirmó.
Zoé Robledo informó que con esta transición el IMSS integrará a su estructura 81 hospitales de Segundo Nivel y más de 2 mil 100 Unidades Médicas Rurales (UMR) distribuidas en 19 entidades federativas, esto representa la suma de 2 mil 730 camas, 93 quirófanos y mil 098 consultorios de especialidad, particularmente de Pediatría, Ginecología, Medicina Interna y Medicina Familiar.
Detalló que la estructura del Primer Nivel de atención brinda servicios clave como consultas de medicina general, vacunación, atención materno-infantil, control de enfermedades crónicas y detección oportuna de cáncer en mujeres. Además, se fortaleció la red comunitaria a través de los Centros de Atención Rural al Adolescente (CARA).
El titular del Seguro Social subrayó que este programa ha sido un ejemplo de solidaridad social, con 28 mil 130 trabajadoras y trabajadores dedicados a brindar atención de calidad en las zonas más necesitadas. Entre su personal, hay casi 2 mil personas bilingües que hablan lenguas indígenas, garantizando una atención culturalmente adecuada y cercana a las comunidades.
“Se encuentran: 7 mil 854 médicos y médicas, 2 mil 280 paramédicos; 9 mil 250 enfermeras y enfermeros, 4 mil 59 trabajadores de limpieza, almacén, conservación; y también algo muy importante: 4 mil 687 personal de acción comunitaria, que es el corazón del Coplamar, la vinculación con la población, con la ciudadanía para las acciones de la salud”, indicó.
Zoé Robledo recordó que desde sus inicios en 1973, el Programa IMSS COPLAMAR ha sido un pilar fundamental para brindar atención médica en zonas rurales y de alta marginación. Comenzó en 1974 con siete clínicas y hospitales en áreas agrícolas, y en 1979 se consolidó como una coordinación dedicada a atender a comunidades vulnerables, especialmente en zonas rurales y comunidades indígenas.
Detalló que a lo largo de sus más de 46 años, este programa ha crecido y fortalecido su presencia en todo el país, con 81 hospitales distribuidos en 19 estados, que suman más de 2 mil 700 camas, 93 quirófanos y más de mil consultorios especializados en Pediatría, Ginecología, Medicina Interna y familiar. Además, cuenta con una amplia red de UMR, brigadas y unidades móviles que llevan atención a comunidades alejadas y a población indígena.