Héctor Pérez, párroco de la iglesia de San Francisco de Asís en Villahermosa, Tabasco, fue atacado con arma de fuego por una presunta confusión mientras salía de su domicilio.
La Iglesia afirmó que el atentado tuvo lugar tras una confusión, a las 5:45 horas de este lunes, cuando Pérez salía para atender a un enfermo.
Sujetos a bordo de una motocicleta lo interceptaron cuando viajaba sobre la carretera de la ranchería de Torno Largo y abrieron fuego en su contra, lo que le provocó múltiples heridas, así como la pérdida de alrededor de un litro de sangre.
Tras la agresión, el padre fue operado en el Hospital Regional de Alta Especialidad Dr. Gustavo A. Rovirosa Pérez, donde reportan su estado de salud como muy grave con pronóstico reservado.
En la cirugía, el personal médico le retiró el vaso tras múltiples heridas internas. De acuerdo con el parte médico, tiene una fractura expuesta de húmero, lesión diafragmática grado 1, lesión de vaso grado 5, lesión de colon y hepática grado 2.
Por ello se llamó a la comunidad acudir al hospital para donar sangre y transfundir al padre.
"El estado de salud del p. Héctor al terminar la cirugía a las 12:52 horas se reporta como muy grave con un pronóstico reservado ante la pérdida de sangre y lo complejo de las heridas internas. Ahora le están fijando tres clavos en el brazo. Está entubado probablemente hasta 72 horas. Tomografía de cráneo limpia, estado neurológico es bueno", apuntó la Diócesis de Tabasco.
Tras lo ocurrido la Diócesis tabasqueña, a cargo del obispo Gerardo de Jesús Rojas, manifestó su repudio a los hechos y llamó a los fieles a unirse en la búsqueda de paz.
"La Diócesis de Tabasco manifiesta por este medio su repudio total a esta acción de barbarie. Pide al Señor mueva los corazones de los injustos agresores a la conversión y arrepentimiento y, que todos los fieles y personas de buena voluntad, se unan en la búsqueda de la paz para nuestro querido Tabasco", comunicó.
El Episcopado Mexicano calificó de cobarde el ataque a Pérez y expresó su consternación con lo sucedido.
El Gobernador de Tabasco, Javier May, lamentó los hechos y se comprometió a que la agresión no quedará impune.
"Lamentamos mucho lo que (sucedió) y nuestra solidaridad contra la Iglesia católica. Decirles que estamos trabajando, que no va a quedar impune y que vamos a dar con los responsables de estos hechos", indicó en conferencia de prensa.
Respecto al clima de seguridad en la entidad, el morenista informó que existe una "tendencia a la baja" en homicidios dolosos.
