San Luis Potosí, SLP. Hace exactamente un año, el 20 de junio de 2024, el Congreso del Estado aprobó por unanimidad el indulto a Sanjuana Maldonado Amaya, quien permanecía recluida en el Centro de Reinserción Social de “El Xolol”, en Tancanhuitz. Hoy, su vida ha dado un giro drástico: trabaja, estudia y se esfuerza por su reinserción en una sociedad que, si bien la apoya, aún la estigmatiza.
En entrevista durante la presentación del informe anual de la asociación civil Perteneces, que fue clave en su proceso de indulto, Sanjuana compartió que el Gobierno del Estado le brindó apoyo al ofrecerle un empleo. Actualmente, labora en el Centro de Justicia para las Mujeres en el área de empoderamiento.
En este centro, Sanjuana coordina actividades y orienta a mujeres en situación de vulnerabilidad que han sufrido violencia física, psicológica y económica. Además, gestiona enlaces con instituciones educativas y laborales para abrirles nuevas oportunidades. "El objetivo es acompañarlas para que no se queden atrás en una sociedad que muchas veces las margina por su historia, pobreza o criminalización", explicó.
Adicionalmente a su trabajo, Sanjuana está estudiando la carrera de Derecho. Reconoció que ha sido un desafío adaptarse a las nuevas tecnologías, ya que durante sus 15 años en prisión no tuvo acceso a computadoras ni celulares. "Me he enfrentado a un reto, que son las plataformas, porque 15 años en prisión se dicen fáciles, pero fue bien difícil. La tecnología no para, y en prisión no teníamos acceso a nada", comentó, pero destacó el apoyo de sus profesores en este proceso de aprendizaje.
Su reinserción social ha tenido altibajos. Mientras recibe apoyo y reconocimiento por su esfuerzo, también enfrenta el juicio de quienes cuestionan su liberación debido al delito en el que estuvo implicada. “Así como apoyaron, también hay otras personas que sí están como de que: ¿por qué salió si era por secuestro? Pero yo voy a seguir demostrando quién soy, que fue un error del sistema penitenciario, fue un error del sistema de justicia”, afirmó con determinación.
Para finalizar, Sanjuana mencionó que la iniciativa de indulto que lleva su nombre, impulsada por Perteneces, aún no ha sido aprobada por el Congreso. Espera que pronto se convierta en ley para seguir apoyando a más mujeres y asegurar que se revisen mejor los casos, evitando que otras pasen por una situación similar a la suya. "Yo me tuve que esperar 15 años a que alguien confiara en mí”, concluyó.