San Luis Potosí, SLP.- Las condiciones globales que prevalecen hasta ahora, representarán un enorme desafío para la industria automotriz instalada en el país durante el segundo semestre del año, especialmente para las armadoras de General Motors y BMW. Así lo advirtió Marek Meister, presidente del Clúster Automotriz de San Luis Potosí, al señalar una serie de factores que impactarán la producción y exportación del sector como los aranceles recíprocos.
Consideró que esto podría obligar a las empresas a realizar ajustes en sus líneas de producción. A esto se suma una baja en el volumen de exportaciones, reflejada en los reportes de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA) y el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
Meister destacó como el tema más crítico la acumulación de inventarios. Según estadísticas del clúster, basadas en órdenes abiertas comparadas con la producción real, ya se observa un desfase que indica un incremento en los inventarios, lo que representa costos adicionales para las armadoras.
Reconoció que los reportes mensuales de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz y del Instituto Nacional de Estadística y Geografía, han mostrado en los últimos meses, una disminución porcentual en el volumen de la producción de vehículos ligeros ensamblados en el país así como en la exportación.
Indicó que la industria automotriz, al ser una de las más globalizadas, es extremadamente sensible a los cambios del entorno internacional. Aranceles más altos o medidas comerciales recíprocas obligan a las armadoras a replantear estrategias, como el traslado de una parte de la producción desde un complejo en México a otro en los EUA, buscando reducir costos o, a la inversa, para abastecer a mercados alternativos”, explicó.
"El segundo semestre será bastante retador", concluyó.
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