La más reciente entrega de Pixar, Elio, ha tenido un arranque desalentador en la taquilla, recaudando apenas 21 millones de dólares en su primer fin de semana en Norteamérica y sumando solo 14 millones en el mercado internacional. Con un presupuesto estimado de 150 millones de dólares, el filme ya es considerado el peor estreno de la compañía en casi tres décadas, encendiendo alertas dentro de Disney y entre analistas de la industria.
Este revés es aún más notorio si se compara con el sólido desempeño de películas en cartelera como Cómo entrenar a tu dragón o 28 Years Later, ambas con propuestas respaldadas por franquicias consolidadas y un público fiel. Elio, en contraste, apostó por una historia original: la de un niño común que es confundido con el embajador de la Tierra en medio de una aventura intergaláctica.
La complejidad de su narrativa, que mezcla ciencia ficción, humor inocente y drama emocional, pudo haber dificultado la conexión con su audiencia objetivo. A ello se suma una campaña de marketing poco clara, que no logró definir con precisión si el filme era para niños, adolescentes o familias completas, lo que habría afectado su atractivo frente a otras opciones más reconocibles.
Expertos también señalan que el mercado actual castiga con dureza las propuestas originales, privilegiando producciones con antecedentes exitosos. En ese sentido, el momento del estreno jugó en contra de Elio, enfrentándolo a títulos con mayor tracción comercial.
Aunque la crítica destacó elementos como su colorido visual y la ambición temática, el fracaso económico de Elio representa un llamado de atención para Pixar, que enfrenta el reto de reconectar con el público en un entorno cada vez más competitivo. El estudio podría apostar por una recuperación vía plataformas de streaming, donde ha encontrado un nicho para títulos menos exitosos en salas.
En medio de este tropiezo, se abre el debate sobre el futuro creativo de Pixar: ¿debe centrarse en secuelas y sagas conocidas o insistir en contenidos originales con enfoques renovados? La respuesta será clave para su permanencia como líder en la animación mundial.