La escalada de tensiones en Oriente Medio no afectará el incipiente diálogo de normalización entre Moscú y Washington, aseguró este lunes el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.
"Se trata de cosas diferentes. Mantenemos nuestras relaciones de asociación, una asociación estratégica con Irán, pero también estamos comprometidos con restablecer nuestras relaciones con Estados Unidos. Ambas direcciones son muy importantes", dijo Peskov a la televisión estatal rusa.
Según el portavoz, del diálogo entre Rusia y Estados Unidos depende, en particular, la posibilidad de "alcanzar acuerdos en muchos otros áreas".
Al mismo tiempo, señaló que "los ataques estadounidenses contra Irán no tienen precedentes".
"Nadie comprende aún las consecuencias, y serán negativas", declaró.
Horas antes, el presidente ruso, Vladímir Putin, tachó de "agresión injustificada" los ataques perpetrados contra Irán por Estados Unidos e Israel al reunirse en el Kremlin con el ministro de Exteriores de la república islámica, Abás Araqchí.
"La agresión absolutamente injustificada contra Irán no tiene ninguna base ni justificación", dijo al comienzo de la reunión.
La semana pasada, el enviado de la Presidencia rusa para asuntos económicos, Kiril Dmitriev, expresó su confianza en la próxima reanudación de las negociaciones entre Rusia y Estados Unidos tras la pausa tomada anteriormente por la parte estadounidense.
Moscú y Washington han celebrado dos consultas bilaterales en la ciudad turca de Estambul en febrero y abril del presente año, que estuvieron encabezadas por el embajador ruso en Washington, Alexandr Darchiev, y la subsecretaria de Estado adjunta, Sonata Coulter.
En estas reuniones ambas partes constataron la existencia de "graves elementos irritantes" en sus relaciones bilaterales heredados de la anterior Administración estadounidense.
Rusia y EE.UU. también celebraron otras dos reuniones para la normalización en la capital saudí, Riad.