Sábado 21 de Junio de 2025 | Aguascalientes.
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Ambulantes enfrentan pérdidas por mal clima

Ericka Segura | Plano Informativo | 19/06/2025 | 16:51

San Luis Potosí, SLP.- Para los comerciantes ambulantes que diariamente se instalan en calles, avenidas y mercados móviles de la zona metropolitana de San Luis Potosí, incluyendo Soledad de Graciano Sánchez y Villa de Pozos, los días de lluvia no solo traen frescura al ambiente, sino también dificultades económicas severas.
 
En esta temporada de lluvias, las afectaciones para quienes viven al día se han agudizado. Juan Carlos, vendedor de frutas y verduras con más de 15 años recorriendo tianguis y mercados ambulantes, compartió el complicado panorama que enfrentan.
 
“Cuando llueve toda la noche, la gente casi no sale al otro día. Si está lloviendo por la mañana, peor. Las ventas se nos bajan hasta un 15% y uno vive de esto, de lo que se gana en el día”, lamentó mientras intentaba cubrir sus productos con lonas improvisadas.
 
Aunque las lluvias recientes han sido recibidas con alivio por el problema de sequía y los intensos calores que azotaron la región en semanas pasadas, para el sector informal, el agua representa un obstáculo diario para obtener el sustento.
 
“Sí, la lluvia ayuda mucho con el agua, con el calor pero a nosotros nos afecta. Mucha gente no sale a comprar, y muchos compañeros mejor ni se ponen, porque se les moja todo. A veces ya ni se recupera lo que se invirtió; se echa a perder la mercancía”, añadió el comerciante.
 
Los mercados ambulantes, que forman parte fundamental de la economía local y del abastecimiento diario para muchas familias potosinas, son también de los más vulnerables ante el clima. La mayoría de los puestos carecen de infraestructura adecuada para protegerse de las lluvias, lo que genera pérdidas económicas constantes en cada temporal.
 
“Más que vender poquito, ya es pérdida total, es muy triste. Nosotros no tenemos otro ingreso, de aquí comemos todos los días”, concluyó Juan Carlos.
 
Mientras las lluvias continúan cayendo sobre la capital potosina, los comerciantes de calle enfrentan una doble cara del clima, alivio para el campo, pero tormenta para su economía diaria.