El enviado especial de Estados Unidos para Siria, Thomas Barrack, alertó este jueves durante una visita oficial a Beirut de que una intervención del grupo chií libanés Hizbulá en el conflicto entre Irán e Israel supondría una decisión "muy mala", sin aventurarse a detallar potenciales consecuencias.
"Tenemos que debatir el asunto, pero sí puedo decir en nombre del presidente (Donald) Trump, quien ha sido muy claro con sus manifestaciones, que esta sería una decisión muy mala", dijo Barrack al término de una reunión con el jefe del Parlamento libanés, Nabih Berri, según un comunicado del máximo legislador.
Así lo indicó el también embajador estadounidense en Turquía preguntado por la posibilidad de que Hizbulá decida intervenir en favor de Teherán, su patrocinador y aliado clave.
En respuesta a otra pregunta sobre los ataques israelíes contra el Líbano que aún continúan pese al alto el fuego acordado hace más de medio año, el enviado especial se limitó a afirmar que si pudiese ofrecer una "solución en dos minutos" no habría necesitado viajar hasta el Líbano, de acuerdo con la nota.
Washington fue el principal mediador del cese de hostilidades y también encabeza el mecanismo de supervisión del mismo.
Mientras Israel sigue atacando el Líbano y mantiene a sus tropas en cinco puntos del territorio libanés, Beirut aún no ha comenzado a desarmar a Hizbulá ni a las facciones palestinas presentes en el país, aunque asegura estar dando pasos para limitar la posesión de armamento exclusivamente en manos del Estado.
