El vicecoordinador económico del PAN en la Cámara de Diputados, Héctor Saúl Téllez, calificó como superficial el acuerdo firmado por el Gobierno federal y empresarios para congelar el precio de la tortilla.
Téllez indicó que el pacto no aborda los factores que se encuentran detrás del alza de precios, como el aumento en los costos de producción, la inflación generalizada, la falta de incentivos fiscales, la dependencia de México a importaciones de insumos agrícolas y las extorsiones que la industria tiene que pagar al crimen organizado.
Detalló que de acuerdo con datos oficiales, en 2018 el precio promedio de la tortilla era de 13.44 pesos por kilo, pero en 2025, alcanzó los 31 pesos en varios estados del país, lo dijo, refleja una distorsión significativa en el mercado que ha afectado gravemente el poder adquisitivo de las familias.
Agregó que según el Consejo Nacional de la Tortilla, existen 130 mil establecimientos que procesan tortillas en el país. De ellos, informó, aproximadamente el 94 por ciento son pequeños negocios que emplean a entre una y cinco personas.
Consideró que sin incentivos fiscales, estos establecimientos siguen enfrentándose a costos elevados de insumos y procesos de producción ineficientes.
Además, señaló, sólo en 2023, México alcanzó una producción de 27.5 millones de toneladas de maíz, mientras que, en 2024, la producción fue de 23.3 toneladas, lo que implicó una caída del 15.3 por ciento.
El legislador explicó que esta contracción se explica por la reducción del área sembrada, la alta siniestralidad - 7.3 por ciento de la superficie fue pérdida total- y por las sequías severas en regiones clave como Jalisco, Michoacán y Estado de México.
En contraparte, agregó, la demanda nacional asciende a más de 48.5 millones de toneladas, por lo que México importó 23.6 toneladas, dependiendo del maíz amarillo proveniente del exterior.
"Estas cifras señalan la alta dependencia de las importaciones y marcan una dependencia estructural y refuerza la vulnerabilidad ante choques externos y pone en evidencia que el Estado no ha sido capaz de generar autosuficiencia ni seguridad alimentaria pese a los discursos políticos nacionalistas estériles que afirman tenemos seguridad alimentaria", expuso.
El panista sostuvo que a ello se suman las extorsiones, el cobro de derecho de piso y el control de rutas de transporte por parte del crimen organizado, lo que obliga a realizar pagos indebidos, práctica que advirtió, pueden aumentar la inflación de alimentos hasta dos puntos porcentuales.
De acuerdo al Consejo Nacional de la Tortilla, refirió, cerca de 20 mil tortillerías del país tienen que pagar extorsiones de hasta tres mil 500 pesos a la semana para que los dejen operar.
"El precio de la tortilla seguirá al alza porque no hay un control real del mercado, ni una política pública que articule producción nacional, importaciones, precios al consumidor y condiciones laborales. Esto es grave en un país donde 7 de cada 10 personas consumen tortilla y el consumo per cápita es siete veces superior al promedio mundial. No es un mal menor, es un síntoma grave del abandono del campo y de la incapacidad del gobierno para planificar una economía popular que funcione", concluyó.