Abierto el debate en el PAN para decidir si mantiene o no su alianza política con el PRI, el ex legislador Santiago Creel Miranda aseguró que las alianzas no deben ser vistas como una cuestión dogmática o indiscutible.
"Hay que dialogar mucho, hay que hacer las valoraciones y decidir relativamente pronto. Las alianzas no son un dogma. Ha habido alianzas porque eso es lo que se ha pensado conveniente para el partido, algunas han funcionado mejor que otras. Las hemos tenido con todos los partidos, salvo con Morena. Yo estaré por lo que le convenga al partido, pero ni dogmas ni prejuicios", sostuvo.
"Las posiciones están bastante equilibradas, entre lo local y lo federal. Lo local tiene un componente y una naturaleza diferente a lo federal. Si bien a nivel nacional se puede tener una percepción, a nivel local, en algunos estados es otra. Hay casos que están gravitando en estos diálogos",
Los panistas se inclinaron en ir en alianza con el PRI en la pasada elección de Durango capital, a instancias de la decisión que tomó la militancia en esa entidad.
Creel Miranda asumirá esta tarde la presidencia del nuevo Consejo Político (presidía la Comisión Política) para analizar temas de fondo y no de coyuntura. Uno de los temas que analizará en fecha próxima será, justamente, el de las alianzas.
"Voy a estar en la posición de impulsar lo que más le convenga al partido, porque pienso que es lo que más le conviene a México. La política tiene muchos vericuetos, aunque ya hay pláticas internas", subrayó.
Cuando asumió la presidencia del blanquiazul, en noviembre pasado, Jorge Romero se comprometió a alentar un amplio debate para determinar si el partido debía mantener su alianza con el Partido Revolucionario Institucional, fuerza con la que participó en la elección presidencial de 2024.
Junto con decenas de liderazgos, la ex candidata a la presidencia del partido, Adriana Dávila, dirigió un escrito al líder nacional, Jorge Romero, para advertir que el blanquiazul debía "deslindarse de una alianza que ha comprometido nuestra identidad como partido. Es momento de romper definitivamente con el PRI. Los convenios firmados en Durango fueron inequitativos, injustos y no tienen explicación".