Durante la mañana del 2 de junio de 2025, el Centro Nacional de Prevención de Desastres (CENAPRED) emitió un nuevo reporte sobre la actividad del volcán Popocatépetl, de acuerdo con la información más reciente, el cielo en la zona del volcán permanece completamente nublado, lo que impide la visibilidad directa hacia el cráter..
El Semáforo de Alerta Volcánica se mantiene en Amarillo Fase 2, lo que indica una actividad volcánica considerada como moderada, este nivel de alerta implica la presencia constante de fumarolas, algunas exhalaciones de ceniza y la posibilidad de emisiones leves de material incandescente, así como explosiones esporádicas de baja a moderada intensidad.
En el reporte emitido a las 11:00 horas, CENAPRED informó que, en las últimas 24 horas, se han registrado 64 exhalaciones de baja intensidad, todas ellas acompañadas por vapor de agua, otros gases volcánicos y, en algunas ocasiones, ceniza.
Asimismo, se contabilizaron 232 minutos de tremor, un tipo de vibración sísmica constante relacionada con el movimiento de magma dentro del volcán, de ese total, 125 minutos fueron de alta frecuencia y 107 de tipo armónico, lo que indica una actividad interna continua aunque estable.
El radiosondeo atmosférico realizado en la Ciudad de México a las 06:00 horas muestra las siguientes condiciones de viento: a 5,000 metros de altura, el viento sopla del norte-noreste a 8 km/h; entre los 5,000 y 7,000 metros, proviene del este también a 8 km/h; y por encima de los 7,000 metros, se presenta un viento más fuerte del este-sureste con una velocidad de 23 km/h.
¿Qué pasará en las próximas horas con el Popocatépetl?
Por otra parte, el análisis de imágenes satelitales muestra nubosidad persistente en la región del volcán lo cual impide la detección precisa de actividad superficial mediante observación remota. Las imágenes obtenidas por el satélite GOES-16 a las 13:31 horas no indican la presencia de ceniza en la atmósfera.
En cuanto al pronóstico de trayectoria de cenizas para las próximas 24 horas, el modelo HYSPLIT ejecutado por la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA) estima que, en caso de una exhalación con emisiones a 500 metros sobre el cráter (que se encuentra a 5,426 metros sobre el nivel del mar), la ceniza se desplazaría inicialmente hacia el oeste-noroeste, para luego dirigirse al suroeste y oeste-suroeste.
Esta trayectoria afectaría principalmente zonas del sureste del Estado de México, suroeste de Puebla, varias regiones del estado de Morelos, así como zonas del estado de Guerrero y áreas sobre el Océano Pacífico. Durante las 12 horas siguientes, se prevé que estas trayectorias continúen sobre el estado de Guerrero y el océano, marcando el posible rumbo de las emisiones de gas, vapor y ceniza del volcán Popocatépetl.
