En abril pasado, las importaciones de mercancías de EU bajaron un 20% respecto al mes previo y con ello el déficit comercial cayó 46%, a 87 mil 600 millones de dólares, reportó ayer el Departamento de Comercio con cifras desestacionalizadas.
Tanto la reducción mensual de las compras al exterior de EU como como de su déficit fueron las más fuertes porcentualmente y en términos absolutos desde que hay registros estadísticos, a partir de 1972, y analistas lo atribuyeron a los aranceles de Trump.
Las importaciones en abril fueron de 276 mil 100 millones de dólares, mientras que las exportaciones, que aumentaron un 3.4% mensual, de 188 mil 500 millones de dólares.
El déficit comercial de bienes de EU se había disparado en los meses posteriores a la reelección de Trump, llegando a un máximo histórico en marzo, ya que las empresas se apresuraron a abastecerse antes de que se impusieran los aranceles que se esperaban de la Casa Blanca.
A principios de abril, se introdujeron fuertes aranceles a casi todos los socios comerciales de EU, una política de la que luego Trump se retractó parcialmente ante la inestabilidad de los mercados.
El aumento de aranceles para la mayoría de los países se pospuso hasta julio, mientras que para los productos chinos recientemente se retrasaron hasta mediados de agosto.
Economistas advierten que esto podría llevar a algunas empresas a volver a importar más, dada la falta de claridad sobre qué sucederá después de las pausas de 90 días acordadas entre EU y China.
Para aumentar la incertidumbre, un tribunal comercial estadounidense bloqueó el miércoles pasado la mayoría de los aranceles de Trump, determinando que el Presidente se extralimitó en su autoridad, pero luego un tribunal federal de apelaciones los restableció temporalmente el jueves.
Enmedio de todo esto los directivos de empresas que cotizan en Bolsa, y que recién terminaron de reportar sus resultados trimestrales sólo tienen algo seguro para los siguientes meses: la incertidumbre.
"De cara al resto del año, aún existe incertidumbre relacionada con los niveles arancelarios, los plazos y los países involucrados, además de las posibles acciones de otros actores del sector", declaró, por ejemplo, Corie Barry, directora ejecutiva de Best Buy.
Así, la confianza de los directores ejecutivos se ha desplomado a su nivel más bajo desde el 2022, con poco más del 80% esperando una recesión en el próximo año y medio, según una encuesta realizada en mayo por The Conference Board en colaboración con el Business Council.
La agencia Bloomberg reportó ayer que desde principios de abril, las palabras "incierto", "incertidumbre" e "incertidumbres" se utilizaron unas 3 mil 100 veces durante las presentaciones de resultados de las empresas y otros eventos.
Ésta fue la mayor cantidad en cualquier trimestre según registros de más de dos décadas, superando incluso el punto álgido de la crisis financiera mundial en el 2008 y el inicio de la pandemia del Covid en el 2020.