La cantante Britney Spears fue reprendida por autoridades estadounidenses tras protagonizar un incidente durante un vuelo privado que la trasladaba desde Cabo San Lucas, México, hasta Los Ángeles, California.
De acuerdo con información publicada por TMZ, Spears, de 43 años, comenzó a beber alcohol durante el viaje y encendió un cigarrillo a bordo del jet, lo que provocó alarma entre la tripulación que le pidió apagarlo y aunque obedeció mostró una actitud considerada como "difícil" a lo largo del viaje.
A su llegada al Aeropuerto Internacional de Los Ángeles (LAX), la intérprete de "Toxic" recibió una advertencia de las autoridades antes de ser dejada en libertad.
La policía de LAX negó haber intervenido, y se presume que fue un oficial de Aduanas quien tomó parte en el asunto. Por su parte, JSX, la compañía de aviones privados que operó el vuelo, declinó hacer comentarios sobre el suceso.
El incidente ocurre luego de que la "Princesa del Pop" se encontraba de vacaciones en México, donde compartió imágenes y videos en los que aparece bailando y posando en bikini, en aparente celebración de su reciente soltería tras separarse de Paul Richard Soliz.
Su relación comenzó en 2023, luego de que Spears fue liberada de la tutela legal bajo la que estuvo más de una década, y poco después de su divorcio de Sam Asghari.
Sin embargo, personas cercanas a la cantante han señalado que sus problemas de salud mental continúan siendo un reto constante en su vida diaria. Asimismo, algunos allegados expresan su descontento con la decisión judicial que terminó con su tutela, argumentando que se desestimaron informes médicos cruciales.
"La jueza se comportó como Hollywood, ignoró todos los informes médicos que tenía frente a ella y simplemente se inclinó ante la gente de Free Britney afuera del tribunal", declaró una fuente cercana al medio.
