Vacío

¿Cuántas ruinas, escombros y basura se han adherido a tu mente, tu corazón, tu Alma? ¿Cuándo fue la última vez que hiciste limpieza en las habitaciones de tu cuerpo emocional?

Los rencores que se vuelven resentimiento, van creando una frecuencia de hedor que similar a la putrefacción, aniquila la opción para crear vida nueva. Pues ¿Cómo habría de habitar la alegría y la motivación en un espacio lleno de decadencia y negatividad? Imagina tu cuerpo, tu mente, tu Alma como una casa habitación.

¿Es un castillo macabro ahogado en el humo de la melancolía, o un hogar cálido, lleno de luz, flores y aromas que relajan? Nos da miedo, pero a veces la única opción para crear algo nuevo es provocar un derrumbe de nuestros antiguos yoes, para construir un espacio de potencia creativa nuevo, uno más acorde a los frutos que hemos podido brotar de nuestra sabiduría.

Derrumbamos lo añejo cuando dejamos de sostener lo insostenible, es decir, las conductas de los otros, las cargas ajenas, el supuesto control. Derrumbamos la antigua estructura, cuando nos permitimos sentir las emociones en su naturaleza pura, cuando abrazamos lo que para la mente social no es “bonito.” ¿Cómo vas a suspirar de alivio, si maquillas el enojo, las tristezas o la vergüenza de las que no hablaste con nadie? Esas emociones están allí para acompañarte a navegar esta vida, para limpiarte, purificarte, guiarte. Si las vas guardando en un armario comenzarán a convertirse en fantasmas dolientes.

 Por eso es muy importante, contar en esta vida con una escucha plena. Y si de momento no la tienes, la escritura es una de tus mejores aliadas. La expresión funciona como el humo de un incienso, va purificando todo ese espacio en tu interior, llenándolo de un nuevo aire vibracional, más puro, nuevo y listo para habitar ese ambiente desde la calma y por ende de la oportunidad de la creación íntima, valiosa y brillante de tus sueños. Cuando tienes ese espacio sagrado en tu mente o incluso en la fisicalidad, es hermoso fincar un nuevo proyecto que le traiga luz a tu vida. Porque ¿Sabes? Si se te ocurrió algo, no es casualidad, es inspiración Divina. ¿Será que la intuición te susurra en el oído una musicalidad en imágenes, para volverte a encarrilar a través del amor del cielo en ser deseante? Porque cuando deseamos crear, estamos conectados en todos nuestros cuerpos, el físico, emocional, energético, mental y espiritual.

Cuando a partir del vacío enfocamos la mirada a una ensoñación, podemos convertirnos en Magos. Así es como se han creado las grandes invenciones para la posteridad. Y no, no tenemos que cargar con el peso en los hombros de que nuestras creaciones o proyectos salven al mundo, porque si nuestra nueva meta es crear un poema, un jardín para polinizadores, una rica cena para uno mismo o compartir, la reparación de un auto o motocicleta, un negocio millonario, unas vacaciones mágicas, un acto de bondad, armar un rompecabezas, disfrutar una taza de café, un descubrimiento medicinal o lo que te venga a la mente ahora, todo eso, ya es la luz Divina expresándose.

No tiene que ser una hazaña gigantesca, pues lo es para nuestra intimidad. Pero para ser como el Ave Fénix, primero hay que soltar, limpiar, purificar y permitirnos conectar con el vacío. Concentrarnos en mirar fijamente al campo infinito de las posibilidades, en donde podremos armar un nuevo camino, un nuevo proyecto.

¿Recuerdas cuales fueron tus últimos proyectos? ¿Algunos se truncaron a causa tuya o de otros? ¿Qué rezagos quedaron de aquellas experiencias? ¿A caso existió violencia, falta de compromiso, fraude, falta de responsabilidad, pereza, quiebre de caminos o alguna otra circunstancia que no permitiera que ese o esos proyectos llegaran a concretarse? ¿Qué energías quedaron estancadas en tu mente a partir de esas decepciones? ¿Te animas a apuntarlo? Ya localizado puedes dejar ir, derrumbar, es decir, expresar y honrar lo que no fue. Porque ¿Sabes? Nos podemos reconstruir a cada momento. Podemos salir del bucle insano de la procastinación.

Podemos crear un jardín interno, a donde acudir cada vez que el ángel del deseo llegue volando hasta nuestro corazón. Podemos crear un bastón de nardos y piedras preciosas, sembrarlo en ese vacío lleno de potencia e inaugurar nuestra meta, amar nuestra creación, ensoñar y hacer lo posible por manifestarlo en el mundo físico. ¿Estás listo(a) para purificar, liberar, soltar y crear tu laboratorio interior de manifestaciones llenas de vida en tu corazón? El vacío, el inmenso vacío todo lo contiene. ¿Estás dispuesto(a) a escuchar a las musas del viento? ¿Qué es lo que saldrá de tus labios, tus manos, tu mente, tu corazón, tu Alma, que sea una luz de belleza en la tierra? Que el vacío creativo te abrace con un dulce aroma hoy. Hoy. Ahora.

Gracias por caminar juntos.

Tu terapeuta.