Luis Enrique Benítez Ojeda, ex dirigente del PRI en Durango renunció a su militancia a menos de un mes de las elecciones locales para renovar 39 ayuntamientos y con una fuerte competencia con Morena para retener alcaldías.
En días pasados también dejaron al partido el ex Gobernador y ex presidente de la Confederación Nacional Campesina (CNC), Maximiliano Silerio; y el ex diputado Rodolfo Guerrero, hijo del ex Gobernador Ángel Sergio Guerrero Mier.
Ambos están dando su apoyo al candidato de Morena para la Alcaldía de Durango, José Ramón Enríquez.
"Ni Alito ni el Gobernador Esteban (Villegas Villareal) tienen palabra. Puras mentiras e incumplimientos. Hacen que los cuadros nos sigamos yendo", afirmó este miércoles Benítez Ojeda, tras presentar su carta de renuncia al dirigente nacional del PRI, Alejandro 'Alito' Moreno, luego de 40 años de militancia.
En el texto de renuncia, Benítez acusó que ya no tiene espacio para participar en el partido y que se lo han transmitido desde altos mandos del Gobierno de Villegas Villareal.
"He llegado a la conclusión de que, si quiero seguir contribuyendo al desarrollo de mi estado y del país, debo hacerlo desde otro espacio, porque en este PRI no tengo ya lugar para participar. Así han determinado que mi ciclo en el partido, en este PRI, está agotado.
"He tomado la decisión de renunciar al PRI. Renuncio al PRI, pero no a la política. Lo hago además con la convicción de que las mentiras, la simulación, los excesos, el autoritarismo y la corrupción dominan hoy al gobierno surgido del PRI, sin priistas en la administración, y con la complicidad silenciosa de una parte del PAN", señaló el ex diputado federal, sobre el Gobierno estatal, que se ganó en alianza con Acción Nacional en 2021.
Manifestó que su bancada daba espacio a todas las expresiones y opiniones, y permitía la sana autocrítica, pero se alejó de la militancia y ahora es un partido que excluye, aparta, guarda rencores, promueve venganzas y se erige como instrumento de castigo por pensar diferente.
"Hoy se cerraron los espacios y la posibilidad de apoyar, porque un hombre en el Estado se siente dueño, ya no uno, sino de dos partidos", agregó sobre el gobernador Villegas.
Benítez expresó que el Mandatario de Durango ya se parece al dirigente nacional, "emulando sus pasos, al ser ya usted el dueño único, con escrituras y derechos de perpetuidad, de tan noble institución política".
Adelantó que poco a poco seguirán migrando los priistas y los que queden serán los que no se atreven a irse por miedo o los que necesitan trabajar en el gobierno estatal.
"No podrán reclamarme nada quienes dicen ser oposición en lo Federal, pero con sus votos en el Congreso local traicionan a un sector de la sociedad que equivocada o acertadamente los puso ahí para defender un mandato diferente".
Sin citar la posibilidad de pasarse a Morena, Luis Enrique Benítez agregó que acudirá a donde sí haya espacio para enriquecer y construir a la nación y al Estado de Durango.
