San Luis Potosí, SLP.- La muerte de un ciclista en el cruce de Vasco de Quiroga y Fray Diego de la Magdalena el pasado fin de semana no es un hecho aislado, sino un nuevo capítulo en la serie de tragedias que enfrentan quienes eligen la bicicleta como medio de transporte en San Luis Potosí. El hecho ha reavivado el debate sobre la falta de condiciones seguras para la movilidad no motorizada en una ciudad que, pese a su crecimiento, sigue apostando por los autos.
El colectivo "Pedaleando SLP", una de las voces más activas en la defensa de los derechos ciclistas, fue tajante, -no se trató de un accidente, sino de un siniestro vial, consecuencia directa de un sistema de movilidad que margina a peatones y ciclistas.- En un comunicado, denunciaron que la ausencia de infraestructura adecuada, la falta de control de velocidad y la inacción institucional son factores que convierten cada trayecto en una apuesta contra la muerte.
En contraste con la tragedia, surgen avances. El Ayuntamiento capitalino anunció que en los próximos días dará a conocer un nuevo Reglamento de Tránsito, cuyo enfoque será priorizar la seguridad de peatones, personas con discapacidad y usuarios de bicicleta. El alcalde Enrique Galindo ha asegurado que esta reforma busca garantizar una movilidad más equitativa y segura, una demanda largamente ignorada por las autoridades.
Asimismo, se ha impulsado la "Ley Santi 2.0", una iniciativa ciudadana que lleva el nombre de Josué Santiago, joven ciclista que sobrevivió a un atropellamiento en 2024. La propuesta busca replantear el marco legal de la movilidad en San Luis Potosí, con el objetivo de proteger la vida de todos los usuarios viales, especialmente los más vulnerables. Sus impulsores piden voluntad política y presupuesto para hacerla realidad.
Pero mientras el discurso oficial avanza, la realidad sobre el pavimento es otra. Las ciclovías están deterioradas, mal señalizadas o simplemente inexistentes. Desde "Pedaleando SLP" denuncian que el gobierno continúa invirtiendo en más carriles para autos, ignorando las normas mínimas de accesibilidad que exige la NOM-004 y relegando las necesidades de quienes se mueven sin motor.
El reciente "Conteo Ciclista", organizado por la sociedad civil, confirmó que miles de personas usan la bicicleta diariamente en la capital potosina. Sin embargo, lo hacen bajo constante amenaza. La urgencia por transformar el sistema de movilidad no puede seguir siendo postergada. Cada muerte en la vía pública es un recordatorio de que la inacción también mata.
Mientras colectivos y ciudadanos claman por justicia vial, queda en manos de las autoridades traducir sus promesas en acciones concretas. No se trata de privilegios, como dicen los ciclistas, sino de derechos. Y estos, hoy por hoy, siguen sin garantizarse en San Luis Potosí.