El sector de las telecomunicaciones en México necesita urgentemente políticas claras y estables y las reglas del juego deben conducir a la competencia efectiva, atraer inversiones y permitir una planeación estratégica a mediano y largo plazo, señaló Ernesto Piedras, director general de The Competitive Intelligence Unit (CIU).
El analista destacó que en medio de un escenario comercial global volátil y ante la posibilidad de aplicación de aranceles, el sector de las telecomunicaciones en México se encuentra en una encrucijada crítica y la incertidumbre regulatoria y los desequilibrios competitivos están minando los incentivos para invertir en infraestructura y transitar a servicios de nueva generación.
Consideró que cerrar la brecha digital no será posible si no se garantiza acceso universal a redes modernas, precios asequibles de los dispositivos y servicios, así como condiciones equitativas entre operadores.
Piedras señaló que las telecomunicaciones son intensivas en capital, pero los operadores enfrentan altos costos para el despliegue de infraestructura y largos periodos para recuperar su inversión. y sin certidumbre sobre el retorno del ejercicio de recursos, su flujo se detiene.
Por otro lado, dijo, la dependencia de equipos importados -routers, smartphones, decodificadores, redes, entre otros- hace que cualquier tensión comercial internacional se traduzca en un incremento de costos y desincentivos de inversión para los operadores.
Una presión adicional sobre el costo de los insumos para los operadores podría agravar estas diferencias y resultar en la salida de jugadores, debilitando la competencia y potencialmente reduciendo las opciones para el usuario final.