A pesar del breve alto el fuego decretado por el presidente ruso Vladimir Putin con motivo de la Pascua ortodoxa, la guerra en Ucrania continúa sin visos de finalizar. Para sostener el esfuerzo bélico, Rusia ha intensificado la búsqueda de reclutas, incluso mediante métodos coercitivos, como se evidenció en un reciente operativo en un gimnasio de Moscú.
Según imágenes y testimonios difundidos en redes sociales, la policía rusa irrumpió en un establecimiento de la cadena Spirit Fitness en la capital rusa, aparentemente en busca de inmigrantes ilegales y evasores del servicio militar. En las grabaciones, se observa a los agentes obligando a los deportistas a tirarse al suelo boca abajo. Testigos relataron que las mujeres fueron autorizadas a salir, mientras que los hombres fueron separados por etnia o nacionalidad y obligados a presentar sus documentos.
Las autoridades exigieron a los hombres mostrar sus pasaportes, revisando de inmediato la página correspondiente al registro militar. A los no ciudadanos se les acusó de violaciones migratorias, enfrentándolos a una disyuntiva: deportación o alistamiento forzoso en el ejército.
Por su parte, los ciudadanos rusos fueron trasladados a oficinas de alistamiento para verificar su historial militar. Tras las revisiones, algunos fueron liberados, mientras que otros recibieron citaciones militares en el acto y fueron detenidos.
Rusia descarta extender el cese al fuego
La tregua de 30 horas anunciada por Putin no tiene visos de extenderse en el tiempo, tal y como ha propuesto el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, después de que Moscú haya echado por tierra toda opción de prórroga.
A través de un mensaje en sus redes sociales, el mandatario ucraniano ha destacado la ausencia de ataques rusos con drones de larga distancia o misiles durante este Domingo de Pascua, coincidiendo el alto el fuego de 30 horas declarado por el Kremlin con motivo de esta celebración, y ha propuesto extender a treinta días este alto el fuego en los ataques aéreos.
"Ucrania propone un cese de todos los ataques con drones de larga distancia y con misiles contra la infraestructura civil por un período de al menos 30 días, con posibilidad de extenderlo", escribió Zelenski en un mensaje en el que también denunció que las fuerzas rusas han roto en la línea del frente más de dos mil veces, con artillería y drones de corto alcance, la tregua de Pascua.
El presidente ucraniano ha añadido que si Rusia no acepta extender la tregua aérea volverá a demostrar que su objetivo es "prolongar la guerra".
La respuesta de Moscú no tardó en llegar. El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, declaró este domingo que no existe ninguna orden de Putin para extender el alto el fuego. "No ha habido ninguna otra orden", afirmó en una rueda de prensa, según informó la televisión pública rusa RBC, descartando así la propuesta de Zelenski.