En plena Semana Santa ocurrió un robo en San Juan del Río, Querétaro, donde un grupo de delincuentes se llevó una campana de más de 300 años de antigüedad, considerada patrimonio histórico de la comunidad del Barrio de la Cruz.
Según los primeros reportes, los responsables no solo robaron la campana principal de 200 kilogramos, sino también otra de 20 kilos y una más de cobre, perteneciente al Santo Entierro de Cristo. El atraco ocurrió durante la madrugada, cuando los ladrones escalaron hasta el campanario para desmontarlas.
Dada la magnitud de los objetos robados, se presume que fue un grupo de personas, ya que sería imposible que una sola lograra cargar con las pesadas campanas. Además, también se reportó el robo de dinero en efectivo y diversos destrozos dentro de la iglesia.
Autoridades ya investigan el caso
María de Jesús Velázquez González, subdelegada del Barrio de la Cruz, informó que ya se dio aviso a las autoridades para iniciar las investigaciones correspondientes, con la esperanza de recuperar las piezas y dar con los responsables.
“Estas campanas no solo tienen valor histórico, también son parte del alma de nuestra comunidad”, señaló la subdelegada.
Vecinos y feligreses han pedido a la ciudadanía reportar cualquier dato que ayude a ubicar el paradero de las campanas, confiando en que, por sus dimensiones y características, será difícil que pasen desapercibidas en el mercado negro.