San Luis Potosí, SLP.- Tras seis meses de trabajo territorial, escuchando de viva voz a vecinas y vecinos de toda la capital potosina, la regidora Adriana Urbina Aguilar, ha logrado un avance en materia de atención ciudadana, al gestionar ocho pipas para la distribución de agua potable en diversas colonias afectadas por la escasez que se vive.
Su labor, reconocida ya por muchos, que comienzan a llamarla "el ángel del agua y la salud", ha sido posible debido al compromiso constante con los derechos humanos y una visión social que la ha llevado a recorrer cada rincón de la ciudad, recolectando testimonios sobre la necesidad de acceso urgente.
“Los derechos humanos deben actuar siempre en favor de asegurar condiciones de vida dignas para nuestra comunidad. El acceso al vital líquido, es un derecho del que todas las personas debemos gozar”, declaró la regidora de Movimiento Ciudadano, quien también preside la Comisión de Salud Pública y Asistencia Social del Cabildo Municipal.
La escasez de este recurso natural afecta especialmente a personas mayores, niñas, niños y personas con discapacidad, quienes a menudo no tienen acceso al líquido necesario para el aseo personal o la ingesta de medicamentos. Esta problemática se agrava ante la proximidad de la temporada de calor extremo, similar a la que se vivió en el año de 2024, donde las altas temperaturas pusieron en riesgo la salud de miles de personas.
“Estamos por comenzar una época de calor extremo. Debemos prevenir desde ahora los daños que esta temporada puede causar, especialmente en temas de salud”.
Se refirió al inicio de una campaña de salud comunitaria, mediante la instalación de módulos móviles de revisión médica que recorrerán colonias vulnerables. Éstos, incluirán servicios de vacunación preventiva, fundamentales ante el resurgimiento de enfermedades que parecían erradicadas.
“Vamos a salir a las colonias para revisar el estado de salud de la gente. Es lo que debemos hacer las autoridades: estar cerca, prevenir y actuar. No podemos permitir que se repitan crisis como las que hemos vivido por falta de atención”.
Además de encabezar las gestiones para resolver el problema que hay de desabasto, ha sido una voz firme en las mesas de trabajo y comisiones del Ayuntamiento, defendiendo el interés colectivo por encima de los intereses políticos o burocráticos.
Su trabajo, cercano y directo con la ciudadanía, ha comenzado a dar frutos tangibles, tanto en el abastecimiento emergente de agua como en la prevención en materia de salud, dos derechos fundamentales para garantizar el bienestar de la población potosina. Demuestra que la política también puede servir para escuchar, transformar y proteger.