Aguascalientes, AGS.- Con una procesión solemne y la bendición de los ramos, cientos de fieles participaron este domingo en la misa del Domingo de Ramos en la Catedral Basílica de Nuestra Señora de la Asunción, marcando el inicio de la Semana Santa en Aguascalientes. La ceremonia fue presidida por el obispo de la Diócesis, Mons. Juan Espinoza Jiménez, quien durante su homilía llamó a vivir esta jornada con humildad, paciencia y esperanza.
“Para llegar a la meta se necesita pasar por la cruz”, expresó el obispo en su mensaje. “La vida tiene momentos de alegría, triunfo y éxito, pero también hay fracasos, enfermedades, dolores. Así se va tejiendo la existencia, con sufrimiento y gozo. Pero tenemos la firme esperanza de que llegaremos al cielo junto con Jesús”.
Durante la celebración, que incluyó la lectura del evangelio que narra la entrada de Jesús a Jerusalén, Mons. Espinoza resaltó el profundo simbolismo de este episodio: “Jesús no entró como los poderosos de su tiempo, sino en un pollino, con humildad, como el rey de la paz. Así nos enseña que el verdadero camino hacia la gloria no está en la arrogancia, sino en el servicio y la sencillez”.
La procesión que antecedió la misa fue acompañada por cantos, oraciones y la participación de familias completas que acudieron a bendecir sus ramos de palma, en un gesto de fe y devoción. “Recordamos con alegría esta entrada triunfal de Jesús, pero también con la certeza de que la cruz es parte del camino. Nos preparamos para acompañarlo en su pasión, con la esperanza de resucitar con Él”, dijo el obispo.
Mons. Espinoza destacó dos actitudes fundamentales que los fieles están llamados a replicar: la humildad y la paciencia. “Jesús, incluso en su sufrimiento, perdona. Y esa puerta sigue abierta para todos. Nadie está excluido del cielo mientras tengamos vida. La decisión está en nosotros”.
Con este llamado a vivir con fe, compasión y compromiso cristiano, la comunidad católica en Aguascalientes da inicio a una de las semanas más importantes del calendario litúrgico.
