Con las medidas arancelarias sobre automóviles y autopartes anunciadas ayer por Donald Trump, el Mandatario pretende cambiar las reglas de origen de la región Norteamérica por pautas nacionales unilaterales, señalaron especialistas.
El miércoles, el Presidente Trump anunció la imposición de un arancel de 25 por ciento a las importaciones automotrices que sería cobrado a partir del 3 abril, pero exentó por ahora a las autopartes que cumplan con el Tratado entre México, Estados y Canadá (T-MEC).
"Entran en vigor el 2 de abril; empezamos a cobrar el 3 de abril", afirmó en el despacho Oval de la Casa Blanca.
Asimismo, el decreto estipula que el arancel de 25 por ciento a las importaciones de autos no fabricados en Estados Unidos sólo se aplicará al valor del contenido no estadounidense; es decir, que los coches que entren al país vecino bajo el T-MEC pagarán las tarifas de acuerdo con la cantidad de contenido extranjera que tengan.
La regla de origen del T-MEC al respecto establece que el 75 por ciento del contenido de los vehículos debe provenir de Norteamérica para quedar libres de aranceles.
"Obviamente es una violación flagrante a lo acordado. El Presidente Trump está cambiando de una regla de integración regional a una regla de origen nacional, cosa que no existe en ningún tratado de libre comercio en el mundo", explicó Ildefonso Guajardo, ex Secretario de Economía que participó en la renegociación para pasar del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) al T-MEC.
"O sea, lo que está diciendo Trump es: 'aquello que no haya sido hecho en Estados Unidos, le voy a cobrar 25 por ciento de arancel'. Entonces si General Motors (GM) o Stellantis o Ford están importando un coche de México donde el 80 por ciento de la transmisión se hizo con partes mexicanas, va a quererle imponer un 25 por ciento a eso".
Guajardo calificó como una "locura" lo que implicarían estos procedimientos y criticó que las disposiciones siguen siendo imprecisas y todavía dejan muchas dudas.
Consideró que la exención de autopartes que cumplen con el T-MEC se hace para no parar en el corto plazo la integración de la industria.
Sin embargo, advirtió que, conociendo cómo opera Trump, realizó el anuncio de los aranceles a los autos ahora para imponerle al Gobierno mexicano condiciones de arranque sobre la revisión en materia de reglas de origen para después decir que le perdona algo.
"Les manda un mensaje a los (funcionarios) mexicanos que están en Washington de: 'vénganse a la mesa y adopten mis posiciones de cómo quiero cambiar el T-MEC'", interpretó Guajardo.
Por su parte, Felipe Mendoza, analista de Mercados Financieros en ATFX, opinó que el cumplimiento de la amenaza de Trump de aplicar aranceles de 25 por ciento a los autos fabricados en México ahondará la volatilidad y la incertidumbre que ha venido afectando a las empresas automotrices en su cotización en los mercados bursátiles, pero también a la industria automotriz mexicana en general.
"Se está generando una volatilidad bastante alta por la incertidumbre en México por la posible caída de la comercialización y por la caída en la inversión del sector automotor, lo que abre la puerta a pensar en los siguientes mercados o siguientes activos o industrias que se podrían afectar por estas decisiones de Estados Unidos", anotó Mendoza.
Refirió que, como se ha visto desde el inicio de las amenazas de ampliar los aranceles a la industria automotriz, que es la más integrada entre Estados Unidos y México, la mayor afectación será el aumento de precio de los automóviles para los consumidores estadounidenses.
"Una alta preocupación es la inflación de Estados Unidos, que es nuevamente el monstruo que Trump acarrea desde que lo eligieron, incluso desde que lo lanzaron como candidato, y pues esa inflación es algo que impactaría negativamente a Estados Unidos y obviamente al consumidor final porque es el que al final cubre ese 25 por ciento extra de los automóviles", puntualizó.
"Respecto a México sigue generando ese temor de perder una industria que es muy interesante para para seguir sobreviviendo y para seguir recibiendo ingresos del tratado de comercio con Estados Unidos", agregó.
Industria clave
Durante 2024 el valor de las exportaciones mexicanas de la industria automotriz fue de 193 mil 907.2 millones de dólares, monto que representó 31.4 por ciento de las exportaciones totales del País.
El 85.8 por ciento de las exportaciones automotrices tuvieron como destino el mercado de Estados Unidos y la industria automotriz aportó más de una tercera parte del valor de las exportaciones de la industria manufacturera del País.
Las armadoras estadounidenses General Motors y Ford son los pilares de la industria de la producción de vehículos en México.
Ford, con sus plantas en Sonora y Estado de México, tiene capacidad de producir 683 mil autos en México, lo que la convierte en la mayor armadora del País.
En tanto, con dos plantas, una ubicada en Guanajuato y otra en San Luis Potosí, con capacidad para producir más de 605 mil automóviles, GM es la segunda mayor armadora.
Ambas superan la capacidad de la alemana Volkswagen (VW), que en Puebla tiene la capacidad de producir casi medio millón de unidades al año.
El 2024 marcó un récord histórico en producción de autos en México, pues se alcanzaron 3 millones 989 mil 403 vehículos, superando el récord previo establecido en 2017. Este desempeño representó un crecimiento anual del 5.6 por ciento en comparación con el cierre de 2023.
Las exportaciones por volumen también marcaron un récord histórico en 2024, con un total de 3 millones 479 mil 86 unidades enviadas al extranjero. Esta cifra superó el máximo alcanzado en 2018 y representó un incremento de 5.4 por ciento respecto a 2023.
En 2024, el 18 por ciento de las ventas totales en Estados Unidos fueron realizadas por México.
