Familiares de personas desaparecidas en Guerrero iniciaron una jornada para exigir justicia por las víctimas del Rancho Izaguirre, en el Municipio de Teuchitlán, Jalisco.
Afuera del edificio del Ayuntamiento de Chilpancingo, los familiares colocaron mantas con las fotografías de sus desaparecidos y en el piso depositaron más de cien zapatos en memoria de las víctimas de Teuchitlán.
"Cuando leí la lista con los nombres de las víctimas de esas fosas, vi que estaba el apellido Mayo y pensé que ese podría ser mi hijo y desde entonces estoy muy triste", aseguró la señora Francisca Mayo madre de Jonathan Munivez Mayo quien fue víctima de desaparición forzada en 2008 en las calles de Chilpancingo.
Francisca Mayo dijo que ahora tendrá que ir a Teuchitlán para buscar a su hijo, porque cree que los presuntos captores de su hijo se lo llevaron allá.
En el acto participó el sacerdote José Filiberto Velázquez Florencio, quien durante su homilía condenó que el Gobierno no tenga interés en detener las desapariciones de personas en México.
"¿Cuántos más de miles tienen que desaparecer para que ahora sí sea una cifra correcta?", criticó el clérigo al referirse a la versión del Gobierno que ha maquillado las cifras de las personas desaparecidas.
"Las cifras oficiales nos hablan de más de 120 mil desaparecidos pero sabemos que esas cifras se quedan cortas porque muchas víctimas no están en esa lista del Gobierno", aseveró.
Velázquez Florencio aseguró que él ha caminado con los familiares que buscan a sus parientes en los cerros, "rascando la tierra para encontrarlos", y que tienen la certeza de que la cifra de 120 mil desaparecidos en realidad es mayor.
Gema Antúnez Flores, integrante del Colectivo María Herrera, aseguró que les llegó la información de que los restos de un hombre que fueron hallados en una de las narcofosas de Teuchitlán pertenecen a un campesino de un Municipio de la región de La Montaña de Guerrero.
"Sabemos que los restos de esta persona de Guerrero ya fueron entregados a sus familiares este jueves para que sean sepultados en su pueblo", dijo Antúnez Flores.
En la protesta, donde se prendieron veladoras y los familiares de las víctimas lanzaron gritos de justicia, no se descartó que en Guerrero haya cementerios clandestinos de los grupos del crimen organizado.
"Le pedimos a la ciudadanía que nos diga si está enterada de los lugares donde hay fosas y cementerios clandestinos para que nosotros podamos acudir; les prometemos que su información será confidencial", pidió Gema Antúnez.
Este sábado 15 de marzo, colectivos realizarán protestas en el Zócalo de esta capital guerrerense para solidarizarse con las víctimas del Rancho Izaguirre, al igual que en diversas entidades del País.
