Rioverde, SLP.- Debido al incremento de especies de flora protegidas por encontrarse en peligro de extinción, los derivados de estas plantas escasean, incluyendo dulces tradicionales que se encuentran cada vez con menor frecuencia.
Uno de estos dulces tradicionales, cuya disponibilidad en el mercado se ha vuelto estacional, es la biznaga, un ingrediente que sigue siendo esencial en algunos de los grandes manjares de la cocina mexicana.
Luis Eduardo Álvarez, comerciante del Mercado Cristóbal Colón, señala que este dulce aún es muy solicitado por su sabor único y su uso en platillos como los chiles en nogada y los tamales de dulce.
Actualmente, hay periodos en los que se agota su existencia y sus precios aumentan constantemente, llegando a costar hasta 150 pesos el kilo para el consumidor final.
En la actualidad, el dulce de biznaga se distribuye desde Guadalajara, pero su empaque ya no lo identifica como tal, sino que se vende bajo el nombre genérico de "frutos".
En la región Media, los artesanos han dejado de preparar este dulce debido a las posibles sanciones por la recolección de esta especie protegida por la Semarnat.
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